Clave en los mejores momentos del Dépor, el colombiano destaca en cada apartado del juego
27 nov 2012 . Actualizado a las 19:54 h.«Lo mejor de Abel es que hace muchas cosas bien». Juan Carlos Mandiá, que disfrutó de la participación del futbolista durante su etapa en el Hércules, resume con esa frase las cualidades del colombiano. Unas virtudes que no se han evaporado con el cambio de club. Abel Aguilar se ha convertido en el referente blanquiazul en la mayoría de los apartados estadísticos. Ausente cuatro semanas por lesión, ha jugado un papel decisivo en los mejores encuentros del Dépor en su regreso a Primera.
En San Mamés no solo marcó el tanto que sacó al equipo de la zona de descenso, sino que fue el jugador visitante que más faltas recibió (tres, como Bruno Gama), el que evitó más disparos del rival, el segundo en saltos ganados (tras Riki) y el tercero que más intervino en el juego con balón, tras Pizzi y Valerón, aunque lo hizo con mucho más acierto que el portugués y el canario (83% de pases acertados frente al 75% y el 71% de los otros dos). Además, el centrocampista figura entre los cuatro primeros en conceptos defensivos clave como despejes y recuperaciones. Datos que hablan de un jugador «muy completo, con presencia determinante en las dos áreas y un grandísimo sentido táctico», como recuerda Mandiá.
Protagonizó la racha inicial
Unos argumentos que fueron clave en el buen arranque blanquiazul esta campaña, cuando el recién ascendido acumuló cuatro jornadas sin conocer la derrota. En su estreno oficial, ante el Osasuna, Abel Aguilar fue el que más intervino en el juego (tocó la pelota una vez cada 68 segundos), fue el que más balones robó, el que más saltos ganó y el segundo con más pases interceptados (después de Aythami).
En el choque de Mestalla, hizo dos tantos y lideró al Dépor en intervenciones y pases interceptados, figurando en los tres primeros puestos en otras cuatro categorías clave. Protagonismo repetido frente al Getafe -fue el que más tocó el cuero, más veces lo robó y el segundo en acierto en el pase- y en la visita a Granada -líder en centros interceptados y saltos ganados y segundo en intervenciones y despejes-.
Pese al enorme rendimiento, plasmado en unos números incontestables, el colombiano no saca pecho. «Me siento como uno más que aporta y trabaja para ayudar al equipo, para conseguir resultados, para estar en una posición cómoda», afirmó ayer en rueda de prensa después del entrenamiento matutino en los campos de Abegondo. «Todos tenemos que tirar para adelante -animó-. Me siento muy tranquilo con mi trabajo. Cuando las cosas se hacen bien con trabajo y con esfuerzo, debe haber tranquilidad»
«Es importante ser sólidos»
Una tranquilidad que, a juicio del centrocampista, pasa por mejorar en un aspecto fundamental: «Defensivamente, es importante ser sólidos. En Primera, tienes que mantener una solidez. Hay equipos con un estilo muy definido en base a la solidez defensiva y que consiguen resultados. Nosotros, por las características de nuestros jugadores de adelante, que tienen mucha calidad, tenemos un estilo diferente, pero debemos ser sólidos». Palabra de Abel Aguilar, un entendido en la materia al que los números avalan.