«Buscamos hacer nuestra versión del sonido disco»

Xesús Fraga
X. Fraga REDACCIÓN

TELEVISIÓN

Amparo Llanos explica los motivos que han llevado al grupo Dover a dar un giro en su carrera con un disco más bailable

15 oct 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

Dover afrontó la grabación de su sexto álbum como un reto creativo y el resultado, Follow the city lights (EMI), representa un punto y aparte en su carrera. El grupo madrileño, con las hermanas Amparo y Cristina Llanos al frente, ha encontrado la inspiración en los ritmos electrónicos y en la incorporación de sintetizadores a su característico sonido de guitarras para apropiarse de la estética disco y hacer su particular versión. El primer sencillo, Let me out, es la carta de presentación de su espíritu bailable, como telón de fondo para un pop luminoso y optimista. Habla Amparo. -¿Le ha gustado cómo ha quedado el disco? -Estamos contentísimos. Esto es algo que no habíamos hecho nunca y, además de aprender un montón, nos hemos divertido mucho. Es esa sensación de hacer una cosa por primera vez. En nuestro caso, lo que buscábamos en este disco era grabar canciones que pudiéramos decir que eran música disco, hacer nuestra propia versión de ese sonido. -Ese uso de la tecnología tiene un aire más bien retro. -Queríamos evocar ese sonido de los setenta y los ochenta. Creo que una canción como Keep on moving tiene ese ritmo de una canción disco de los años setenta. Y en la discográfica, cuando escucharon Let me out por primera vez, alguien dijo, «cómo me recuerda esto a Video killed the radio star ». -¿Y qué opinan sus fans? -Es pronto para decirlo todavía, porque el disco lleva pocos días en la calle. Pero cuando salió el primer sencillo sí que se montó un gran revuelo. En los foros de Internet había opiniones a favor y en contra, lo cual está muy bien. -¿Qué cuentan en «Dear McCartney»? -Es un homenaje sentidísimo y algo ingenuo a Paul McCartney. Su música nos ha acompañado y nos gusta desde siempre, en solitario, cuando estaba en Wings y, claro, en los Beatles. Es un homenaje desde el cariño. -Su primer disco es de 1995. ¿Cómo ven su carrera y el mundo de la música? -A nuestro alrededor han cambiado muchas cosas en la música, ha habido etapas, unas mejores y otras peores, en las que las cosas eran más fáciles o más difíciles. Pero en nuestra vida profesional, que también es la personal, no ha cambiado tanto: el grupo sigue siendo nuestro antídoto contra la angustia vital que podemos sentir. Ya sé que suena previsible, pero Dover es lo que da sentido a nuestras vidas y gracias a ello sabemos quiénes somos. Me hace no tener miedo del paso del tiempo. La actividad diaria de componer, tocar y ensayar nos libera de esa angustia vital y nos sentimos inmortales; es igual que cuando te enamoras, que te sientes inmortal.