La prohibición total en México eleva a medio centenar los países que vetan los vapeadores

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Un grupo de personas se manifiestan en México a favor del vapeo
Un grupo de personas se manifiestan en México a favor del vapeo Mario Guzmán|Mario Guzmán | EFE

En Malasia la multa por usarlos asciende a 1.300 euros y en Tailandia incluso hay penas de cárcel

11 dic 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Al menos 130 países en el mundo tienen regulaciones que afectan a los vapeadores y demás tipos de cigarrillos electrónicos. Están relacionadas con las edades de acceso, los lugares en los que se pueden vender, los sitios en los que está restringido el consumo o la concentración de nicotina. Entre ellos, en torno a medio centenar vetan estos productos de manera más o menos estricta.

En el grupo de los que más, acaba de entrar México. La Cámara de Diputados ha aprobado por 324 votos contra 129 la iniciativa de la presidenta de la república, Claudia Sheinbaum, que establece penas de entre uno y ocho años de cárcel por la venta de «cigarrillos electrónicos, vapeadores y otros sistemas o dispositivos similares». La ley sanitaria de México, ahora reformada, los define como «todo aparato o sistema mecánico, electrónico o de cualquier tecnología, que se utiliza para calentar, vaporizar o atomizar sustancias tóxicas, con o sin nicotina, diferentes al tabaco, susceptibles de ser inhaladas por la persona consumidora». Unos usuarios que, eso sí, no podrán ser penalizados ni por el consumo ni por su tenencia para utilización personal.

Frente a ese amplio apoyo de los diputados oficialistas, los opositores dicen que solo va a servir para alimentar el comercio clandestino. «No regular un producto que la gente ya consume es igual a más mercado negro y más dinero para los narcos», aseguró, tal como recoge Efe, Iraís Reyes, de Movimiento Ciudadano.

El ejemplo de México no es uno más, porque la venta de los vapeadores ya estaba prohibida desde mayo del 2020 y porque se creó todo un movimiento de protesta, articulada en torno a Vapers Alliance y All Vape México. Entidades a las que también les llueven las críticas por, supuestamente, no ser más que instrumentos pagados por las tabacaleras. En marzo del año pasado, llegaron a juntar más de un millar de personas frente al Congreso.

Sin salir del continente americano, además de México, tienen prohibida la venta de vapeadores Argentina, Brasil, México, Nicaragua, Panamá, Surinam, Uruguay y Venezuela, que se sumó hace dos años.

En realidad, la mayor parte de la población mundial vive en países con serias restricciones a los cigarrillos electrónicos, más que nada por el peso poblacional que tienen India y varios países del sudeste asiático donde existen distintas prohibiciones. En general, los vetos más comunes están relacionados con la importación, producción y distribución. Ahí entra India, pero también países tan distintos como Turquía o Bután. También varios estados del golfo Pérsico (Catar, Kuwait, Omán, Emiratos Árabes) y naciones de lo más variado a nivel geográfico y cultural como Uganda, Sri Lanka, Timor Oriental, Nepal, Siria o Turkmenistán.

Pero hay casos bastante más extremos en los que el simple hecho de poseer un vapeador puede implicar penas de cárcel. En Singapur, una ciudad-estado de seis millones habitantes situada al sur de Malasia, vapear está prohibido desde el 2018 e implica una multa de 2.000 dólares singapurenses, unos 1.300 euros. En Tailandia está prohibido importar, vender, poseer y usar so pena de multa e incluso de cárcel. En el vecino Vietnam, también hay una ley, en vigor desde el año pasado, que establece sanciones económicas para los simples consumidores, lo mismo que ocurre en Maldivas desde el 2024.