La directora de la Organización Nacional de Trasplantes, Beatriz Domínguez Gil (Santiago, 1971) asegura que el principal reto ahora es consolidar el programa internacional y aumentar el número de parejas beneficiarias, antes de sumar nuevos países.
-¿Acostumbrados a darnos buenas noticias, en esta ocasión parece que han hecho el más difícil todavía?
-Sí, sí es verdad que es el más difícil todavía (sonríe). Lo que creemos que es un paso importante para aumentar las opciones de trasplante de pacientes que tienen muchas dificultades para trasplantarse. Es un logro que es más importante desde el punto de vista cualitativo que cuantitativo, porque realmente da opciones de trasplante a pacientes que tienen serias dificultades para encontrar un donante adecuado a sus necesidades. También es una nueva muestra de que España sigue a la vanguardia en trasplantes a nivel internacional.
-El programa español de trasplante renal cruzado lleva varios años en marcha. ¿Es más complejo realizarlo si se involucra a otros países?
-La complejidad del programa internacional es mayor a nivel organizativo, porque hay que tener todo el proceso bien pensado, organizado, consensuado y no dejar nada a la improvisación. Entonces no hay problema. Esa es la clave. De hecho, en ocho semanas resolvimos los trasplantes, por lo que estamos muy contentos con el poco tiempo que nos llevó organizarlo todo.
-Pero sigue, entonces, las mismas pautas que el español.
-El objetivo claro del programa es aumentar el número de parejas participantes y su heterogeneidad genética. Dimos los mismos pasos que en el español: establecimos unos requisitos para que los centros puedan participar, habilitamos el registro de trasplante renal cruzado de la ONT para su uso a nivel internacional y elaboramos un protocolo muy estricto de cumplimiento al que se tienen que adherir todos los centros participantes.
-¿Es la ONT quién lo coordina?
-Evidentemente se requiere una organización que coordine todo el proceso y lo gestione a nivel supranacional, que en este caso somos nosotros por nuestro conocimiento y experiencia.
-¿Incorporarán a otros países, a Francia, por ejemplo?
-Estamos valorando tanto la participación de Francia, como de Suiza y de la República Checa. Esta opción existe, pero nuestro objetivo a corto plazo es consolidar lo que logrado. Queremos realizar esta actividad de una forma periódica, aumentando complejidad a las opciones de trasplante, logrando combinaciones de más de dos parejas e introduciendo la figura del buen samaritano.