Las mujeres trabajan una media de 1,1 horas más al día que los hombres

La Voz BARCELONA / EUROPA PRESS

SOCIEDAD

MARCOS MÍGUEZ

Se encargan del 67 % de la producción no remunerada, sobre todo relacionada con el trabajo doméstico, cuidado de los niños y familiares dependientes

11 sep 2017 . Actualizado a las 07:30 h.

Las mujeres entre los 21 y los 65 años trabajan 1,1 horas más al día que los hombres en España, aunque mayoritariamente lo hacen en actividades por las que no perciben ninguna retribución y están fuera de la protección que supone tener un empleo remunerado. Así lo concluye el estudio Mujeres y hombres, consumo y producción a lo largo de la vida. Una relación desigual, liderado por Elisenda Rentería del Centre de Estudis Demogràfics.

También han participado en el trabajo las investigadoras Rosario Scandurra, Guadalupe Soto y Concepció Patxot, quienes han evaluado de forma pionera la relación desigual existente a nivel de trabajo por franjas de edades.

Según sus conclusiones, la situación de España es similar a la de países del sur de Europa como Italia, en los que la incorporación al mercado laboral de las mujeres no ha ido acompañada de una reducción de la actividad en el cuidado de menores y mayores y tareas del hogar. Rentería lo ha atribuido a «cuestiones culturales e institucionales» y falta de medidas públicas relacionadas con las bajas de maternidad, que no son suficientemente largas.

Las mujeres españolas realizan solo un 39 % de toda la producción de mercado, si bien se encargan del 67 % de la producción no remunerada, sobre todo relacionada con el trabajo doméstico, cuidado de los niños y familiares dependientes.

Ellas realizan actividades no remuneradas prácticamente a lo largo de toda su vida adulta, mientras que los hombres lo hacen entre los 30 y los 50 años, que suele coincidir con el momento en que son padres de niños pequeños. Los resultados ponen de manifiesto la importancia que tienen los cuidados y las actividades no remuneradas en el bienestar de las personas, así como la necesidad de repensar el sistema de políticas sociales con el fin de reducir los costes de conciliar familia y trabajo.