La dama de las mil camelias está en Boiro

Paula Riveiro / P. C.

SOCIEDAD

DANI GESTOSO

Ana Calo ha abierto su finca a los visitantes, donde tiene más de un millar de estas plantas, otras 600 variedades de especies distintas y también animales curiosos

24 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

A todo coleccionista le gusta enseñar sus piezas. Les pasa por igual a los que compilan cromos, coches o plantas. Este último es el caso de Ana Calo, una apasionada de la jardinería que empezó a plantar flores para hacer más vistoso su jardín y ahora tiene toda una finca repleta de arbustos de todo tipo que enseña a los visitantes. A Casa das Camelias -así es como se conoce por tener más de mil ejemplares de esta planta- tiene una extensión de 12.000 metros cuadrados en los que también hay más de 600 especies de plantas distintas. Este paraíso privado está situado en la aldea de Brazos, en el municipio de Boiro, y es uno de los principales atractivos de los visitantes que eligen la comarca para sus vacaciones.

El gusto de su cuidadora por la naturaleza y las plantas empezó hace mucho tiempo, pero cada vez ha ido creciendo más hasta llegar a ser una forma de vida. Hace más de 20 años que cortó los viñedos que, por aquel entonces, ocupaban la finca y empezó a cultivar plantas de distintos tipos, colores y tamaños. Las primeras fueron las camelias, ya que «hay muchos tipos y variedades, pero llega un momento en que saben a poco». Por ese motivo decidió incorporar otras especies de plantas, procedentes de los cinco continentes y de climas y temperaturas muy diferentes.

Lo que empezó como una simple afición acabó por convertirse en su día a día. A esto se le sumó la necesidad de mostrar su enorme colección a todos los que, como ella, son unos apasionados de la jardinería. Fue desde el propio Concello boirense que la animaron para que abriera las puertas del jardín de su casa y empezara a hacer visitas guiadas. Las explicaciones, realizadas por ella misma, se llevan a cabo de lunes a domingo, pero siempre con previo aviso. Empiezan a las cinco de la tarde y duran entre una hora y media y dos horas.

Flores durante todo el año

«Como cualquier jardín, está más bonito en primavera, pero hay plantas que florecen en todas las épocas del año», comenta Ana. Aunque la temporada de las camelias es de septiembre a mayo, la gran extensión de terreno da para mucho. Además de este ejemplar hay otros más exóticos, por lo que el jardín siempre está florecido. Pero no solo por las plantas se caracteriza A Casa das Camelias, ya que también hay espacio para los animales. Peces, tortugas, faisanes y especies de lo más peculiar. «Nadie lo cree antes de verlo, pero tengo gallinas que ponen huevos azules, otras que tienen cuernos y unas que en vez de plumas tienen pelo».

Su terreno está bañado por un río y cuenta con un molino que activa para las visitas Además, la finca está bañada por un pequeño río, en el que hay un antiguo molino que pone en funcionamiento en las visitas que tiene durante el invierno. La humedad de este riachuelo provoca que algunas especies arbóreas no sobrevivan, pero esto también le permite tener plantas acuáticas, porque, como bien afirma la experta en jardinería: «Tener de todo es imposible».

Una afición imparable

Cada vez que viaja hace una parada en algún vivero para añadir nuevas especies a su colección. La recopilación es tal, que algunas veces no se acuerda en qué momento plantó algo. «Para mí lo que hay ya no es novedad, por eso sigo queriendo más», reconoce. La variedad de especies es tan grande, que el mantenimiento del jardín no sería posible sin la ayuda de su familia. En su terreno de Boiro apenas hay ya espacio para más plantas, pero dejar de completar la colección no entra en sus planes.