Ellas los prefieren con pelo en pecho

tania taboada

SOCIEDAD

P.CHAPELA

Comprobamos en Sanxenxo si es cierta la tendencia que apunta una encuesta

03 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Cambian los tiempos, mutan las modas pero al final todo regresa a los orígenes. Si la ropa expuesta en los escaparates actuales es semejante a la de antaño, en cuanto a la estética sucede algo parecido. Un ejemplo es el hombre de pelo en pecho. Después de que la depilación masculina se convirtiese en algo básico y que los hombres optasen por hacer desaparecer su vello, semeja que los gustos de ellas cambian y retroceden al pasado. Así lo asegura la web Victoria Milan. Lo hemos testado en el propio arenal de Sanxenxo.

El hombre con pelo en pecho vuelve a estar entre la opción preferida por la mayoría de las mujeres. Parece que el varón depilado ya no atrae tanto al ojo femenino, que pone ahora la vista en el que luce vello. «El hombre sin pelo en pecho no es hombre. Con esto no quiero decir que parezca un oso, pero con algo de pelo está mejor», opina Sandra Díaz, una joven de 33 años, de Ciudad Real, que esta semana se encontraba en la playa de Silgar.

La visión de esta manchega coincide con la reciente encuesta realizada por una sexóloga de la citada web. El sondeo revela que el 63 % de las mujeres se sienten atraídas por los hombres altos; un 37 % los prefieren con pelo en pecho, frente a un 10 % que aseguran gustarles más los depilados. Pero también hubo opiniones que desmontaban la encuesta. «Pues a mí me gusta que estén depiladitos. Detesto los pelos, me dan sensación de suciedad», manifestaba Uxía Rey, una joven de Santiago que paseaba por el arenal.

Actualmente, la mayoría de los jóvenes prefieren sufrir unos minutos pero estar sin un pelo. Esto se percibe en un arenal. En la playa de Silgar se puede comprobar cómo la mayor parte de los hombres de menos de 40 años estaban depilados. «Me depilo porque no me gusta el pelo. Además estoy mucho más cómodo», decía Víctor Vázquez, un joven de Cambados que opta por la tecnología láser para combatir el vello. «Mis amigas me han recomendado que me depilara», comentaba Javier Martín, residente en Toledo y que disfrutaba de sus vacaciones en Galicia. «Me depilo desde hace cuatro años por higiene y estética. Además, me siento mucho más cómodo. Empecé haciendo la fotodepilación pero me producía alergia. La zona me quedaba muy roja. Desde hace un año utilizo una maquinilla específica para todo el cuerpo, y genial», explicaba David Martín.

Pero como en la variedad está el gusto también se encontraba algún hombre con pelo. «Tengo 24 años y no me apetece depilarme. Me da mucha pereza», justificaba Juan Vara. «Me ha costado 34 años tener esto -señala su pelo en pecho- y lo siento. Ahora no me lo saco ni de broma. Es mío», explicaba José Luis Díaz, quien se niega a pasar por los rayos o por la cuchilla. «Excepto que sea vida o muerte no me depilaré. No me molesta el pelo y además me da pereza depilarme. Me he acostumbrado y así me siento bien», apostillaba Santiago Díaz. «Creo que son ellos los que se ven mejor sin pelo. No lo hacen solo por gustarles a las chicas. Para ellos hacer el láser es como afeitar la barba», opinaba Laura Cagide, una madrileña que se encontraba tomando el sol en el arenal de Sanxenxo.

Opiniones diversas, pero que marcan un antes y un después. El eterno retorno.