Una investigación de dos estudiantes de Viana do Bolo dice que sus fases no influyen en el número de nacimientos
14 mar 2011 . Actualizado a las 06:00 h.«El viernes cambia la luna, prepárate que te pones de parto». La profecía, que casi ninguna parturienta gallega se ha librado de escuchar, no es más que una simple casualidad (en aquellos casos en los que llega a cumplirse). A esta conclusión llega una investigación realizada por dos estudiantes de segundo de bachillerato del IES Carlos Casares, de Viana do Bolo, echando abajo una creencia popular que ha ido pasando de generación en generación como si estuviese basada en estudios científicos.
Adrián Ortega y Pablo Sánchez invirtieron dos años -tutelados por los profesores de ciencias y matemáticas Ovidio Villar y Luis Fernández, respectivamente- en analizar 1.392 nacimientos: 672 sacados del archivo histórico del instituto, 570 de partos naturales facilitados por el servicio de ginecología del Hospital Comarcal de Valdeorras, y 150 más de un pueblo de Bolivia (como muestra de control del hemisferio sur). A cada fecha de nacimiento se le asignó un día de los 29 del ciclo lunar, sin poder constatar que hubiese picos según determinadas fases de la luna.
Estos datos contrastan con la creencia popular de que sí hay una correlación entre la luna y los partos, tal y como se desprende de las 140 entrevistas realizadas por los estudiantes. «La mayoría, incluso médicos, y personas con formación científica» así lo creían, apuntan. Los resultados de este estudio fueron presentados en Zaragoza, dentro de la 24.ª edición del certamen nacional Don Bosco a la investigación e innovación tecnológica. Fueron seleccionados junto a otros 60 experimentos de España, Eslovenia e Italia realizados por menores de 26 años.
Adrián Ortega Fernández, que estudia segundo de bachillerato, es natural de Viana do Bolo.
Pablo Sánchez González, estudiante en Viana, reside en el municipio de A Veiga.