El profesor De Rose subrayó a la agencia italiana AGI que hay que «volver a considerar el problema de la seguridad de la bicicleta» y recalcó que «desde hace tiempo, se han evidenciado en los ciclistas molestias como uretritis, prostatitis, hematuria, torsión testicular e insensibilidad en el pene».
Así mismo, remarcó que la bicicleta «está considerada como un factor de riesgo para la disfunción eréctil».