Atasco sin problema

SOCIEDAD

MEDIO FERRADO

30 oct 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

«EN A Coruña no hay problema de tráfico», dice la concejala Carmen Marón, y uno se acuerda de esa frase y ese titular metido en el atasco de media hora que se forma para entrar a la ciudad desde los polígonos industriales. No nos quejemos. La frase no era un diagnóstico científico. Era un mantra, una oración. Cuando le toque caer en el tapón de coches y humos, repita el mensaje con los ojos sólo entreabiertos (por si se mueve el de delante): «No hay problema de tráfico, ¡om!; no hay problema de tráfico, ¡oooom!». Ya verá qué bien se siente, qué paz interior. Comprenderá que los coches están para esto, para oír la radio y hacer verbenas de luces rojas y bocinas mientras las hormigas te adelantan por el arcén. Si los demás atascados repitieran el mensaje iluminador de la concejala, no tendríamos esta especie de pelea sorda que se traen en la cuarta fila de la izquierda, a base de bocinazos y de amagar con que abren la puerta para pasar a las manos; ni esa violencia al cerrar el paso a los listillos que se han saltado la fila metiéndose por dirección prohibida a la derecha de la rotonda y que ahora quieren incorporarse a la corriente (es un decir) principal. ¿Será así todos los días? ¿La misma lucha de bocinazos, la misma exhibición de los listos que se cuelan? Si les toca esta batalla a diario, hagan el favor de ser sabios y reciten el mantra de la Marón. Y el que tenga prisa, que coja la bicicleta. O que venga en tren.