Noriega valora dar el salto a Compostela

Domingos Sampedro
domingos sampedro SANTIAGO / LA VOZ

TEO

XOÁN A. SOLER

Anova demanda que su capitán libre la batalla por la capital gallega ante el PP

01 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

A Martiño Noriega, que ejerce la portavocía nacional de Anova de forma colegiada con Xosé Manuel Beiras, le ocurrió aquello que hace ocho meses decía un buen conocedor del universo político compostelano: «O se postula como candidato en Santiago o irán a buscarlo a casa». Porque, en el último año, tuvo el alcalde de Teo muchas ocasiones de responder con un «no» tajante a todos aquellos que le preguntaron por su salto político a la capital gallega, el mismo «no» que pronunció cuando los jerarcas de Izquierda Unida lo sentaron a la mesa para servirle en bandeja el escaño en Estrasburgo, oferta que declinó en favor de Lidia Senra.

Pero las cosas han cambiado y el capitán de Anova ya no parece dispuesto a perder todos los trenes que pasan ante su puerta. El vigoroso protagonismo alcanzado por Podemos tras las elecciones europeas y las restricciones que aplica Pablo Iglesias para asumir procesos de mestizaje con otras siglas, resquebrajaron la hoja de ruta y el espacio electoral de Anova y la coalición en la que participa, Alternativa Galega de Esquerda (AGE), haciendo añicos los cálculos personales que tenían los dirigentes con más pretensiones, con Noriega y el diputado Antón Sánchez a la cabeza.

En este nuevo escenario empezó a cobrar forma el plan para el desembarco compostelano del capitán Noriega, trazado hace días por sus más estrechos colaboradores, entre quienes destaca el polifacético editor Manuel M. Barreiro, en su día jefe de gabinete de Anxo Quintana en la Xunta y miembro de la coordinadora nacional de Anova, aparte de impulsor de proyectos de comunicación como el diario digital praza.gal, la televisión Galiza Ano Cero o la revista Luzes.

Hay que tener en cuenta que Santiago es una de las ciudades gallegas donde no acaba de cuajar un movimiento ciudadano, similar a la Marea Atlántica de A Coruña, pese a los esfuerzos de Anova, que tiene un discurso político hecho a medida de este tipo de candidaturas y de acudir a las urnas formando una «fronte ampla». E incide también el hecho de que el PSdeG compostelano, muy fragmentado tras las primarias de noviembre, se inhibió en parte de dar la batalla frente al PP de Agustín Hernández, lo que provocó que algunas significadas personalidades que su día apoyaron a Mercedes Rosón fueran ahora a timbrar a la puerta del alcalde de Teo para rescatar a la izquierda en la ciudad, no vaya a ser que en un despiste al PP le falte aliente y Francisco Reyes se convierta en alcalde.

El caso es que todo lo anterior ayudó a que Noriega cambiara su «no» por un «sí» o, para ser exactos, por un «depende». Porque lo que el capitán de Anova dejó claro antes de dar su respuesta esta misma semana es que abrirá una ronda de consultas para conocer la opinión de una serie de personas, priorizando, eso sí, lo que puedan decir desde la plataforma Compostela Aberta, uno de los embriones posibles de la candidatura ciudadana; desde Podemos, cuyo máximo representante en la ciudad, Víctor Casas, ya dejó claro que un movimiento de este tipo ha de concretarse «de forma participativa e con listas abertas»; y desde Esquerda Unida, que asumirá «con xenerosidade» lo que se plantee desde Anova.

Ronda de consultas

La operación Noriega está desplegada. Y justo en el momento en que AGE se ha convertido en una especie de Yugoslavia sin Tito, el coportavoz nacional de Anova parece decidido a dar la batalla por el control de la capital de Galicia. Y el tiempo dirá si es para quedar en Raxoi o para preparar desde ahí la batalla de las autonómicas.