Los psiquiatras descartan que la acusada de matar a tres ancianas sufra trastornos de personalidad
BOIMORTO
La gallega Remedios Sánchez, acusada del asesinato de tres ancianas y de haber intentado matar a otras seis, acciones que ella misma atribuyó a otra persona llamada Mary, no tiene patologías psiquiátricas ni padece un trastorno de doble personalidad, destacaron ayer los médicos forenses que la analizaron. «Hay muchas cosas posibles en medicina», pero en este caso «es poco probable que, por sus rasgos de personalidad, creara otra persona», aseguró una de las psiquiatras que testificaron ayer en la segunda jornada del juicio que se celebra en la Audiencia de Barcelona.
Los expertos tampoco observaron «enfermedad alienante ni psicopatológica evidente, ni trastorno alguno de la personalidad», pese a que Reme presentaba un comportamiento «impulsivo» y «hostil», así como dificultades para autoanalizarse y saber las motivaciones de sus actos.
Reme, nacida hace 51 años en el municipio coruñés de Boimorto, se enfrenta a 172 años de prisión por tres asesinatos, seis intentos de homicidio y siete robos con intimidación cometidos en Barcelona entre el 10 de junio y el 3 de julio del 2006.
La policía nunca ha encontrado rastro alguno de Mary y todas las pruebas halladas durante la investigación apuntan a Reme como la autora de los crímenes que se le imputan. En el registro del domicilio de la procesada que se hizo tras su detención se encontraron objetos de prácticamente todas las víctimas a las que presuntamente había atacado y, además, «no se hallaron elementos que indicaran que pudiera vivir alguien más en el piso», según explicó ayer el responsable de las investigaciones, el inspector de los Mossos d'Esquadra Josep Lluís Trapero.
Este inspector explicó que el modus operandi se repetía en cada caso y que enseguida las investigaciones se centraron en una mujer que conocía a algunos vecinos de las víctimas, que decía llamarse Mary y que resultó ser Remedios Sánchez. Las declaraciones de las víctimas y de otros testigos desmontaron el primer día la defensa de la acusada.