Las flores que un desconocido lleva cada año a la tumba del piloto de Rois son del color del Subaru con el que competía antes de enfermar
05 nov 2020 . Actualizado a las 10:14 h.Cuatro rosas azules. Esas son las flores que, desde hace siete años, alguien deposita de forma anónima el día de Difuntos ante la sepultura del piloto de ralis de Rois José Manuel Pose Castelo. A sus padres, José Pose y Mercedes Castelo, les gustaría saber quién es esa persona, aunque también respetan que quiera permanecer en el anonimato, y le agradecen que se acuerde de su hijo.
Al no saber su identidad, tampoco saben por qué esa elección de flores, aunque la madre apuntaba ayer la posibilidad de que el azul tenga relación con el último vehículo de competición que pilotó su hijo, que es del mismo color. En cuanto a la cantidad de las rosas, cuatro, para la progenitora puede ser por el número de ruedas de un vehículo. Es por ello que los padres de José Manuel Pose creen que la persona que lleva las flores puede estar vinculada a los ralis, un ámbito que aún tiene muy presente a su hijo. Tanto es así que en el 2018 el Rali Botafumeiro estuvo dedicado al piloto de Rois. Y es que esta competición fue la pasión de José Manuel Pose, que falleció en el 2013 con 39 años a causa de un cáncer. Empezó a correr a los 18, tan pronto sacó el carné de conducir, según recordó su madre. Su primer coche de competición fue un Panda, y el último, el Subaru, de color azul, como las rosas. Esos vehículos están en la finca de los padres, «e mentres nós vivamos aquí seguirán», dice la madre. Si el mundo del rali aún tiene presente al piloto, mucho más sus padres, que dicen que era una persona muy especial para mucha gente, empezando por la familia, y que siempre estaba rodeado de amigos.