El Ayuntamiento ha decidido recurrir la sentencia que declaró improcedente el despido de la entonces directora de la Unidade Municipal de Atención a Drogodependentes (UMAD), Pilar Bermejo, con la que rompió la relación laboral en octubre del 2011 después de instruir un expediente disciplinario que concluyó que había utilizado su puesto de trabajo en beneficio propio o de sus familiares. La improcedencia de aquella decisión municipal fue declarada por un juzgado de lo Social de Santiago al entender que si bien los hechos relatados en el expediente disciplinario están probados no resultaban «acreditados de forma contundente» para declarar procedente el despido.
En esencia, el juzgado no considera demostrado que la vinculación de Bermejo con la asociación Chisem, en la que trabajó su hijo y en la que ella misma actuó como docente, haya sido determinante para que esa firma recibiese adjudicaciones de la UMAD entre el 2006 y el momento de la apertura del expediente, en el 2011.
El recurso del Concello habrá de verlo el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, pero en tanto no se resuelva, la Xunta de Goberno decidió también ayer readmitir temporalmente a la funcionaria despedida en el mismo puesto y condiciones en que estaba antes de su cese. La incorporación será inmediata una vez que se le notifique este acuerdo, según la portavoz del gobierno local y concejala de Benestar, Paula Prado, de la que depende la UMAD. En diciembre podría incorporarse ya a su puesto. En el caso de no readmisión el Concello debería indemnizar a Bermejo con unos 200.000 euros.