El Museo acoge la exposición antológica del arquitecto Alejandro de la Sota

La Voz

PONTEVEDRA CIUDAD

emilio moldes

06 abr 2018 . Actualizado a las 21:37 h.

Alejandro de la Sota. Pontevedra, 1913 ? Madrid, 1996. Construírse/Construír es el título a la exposición antológica dedicada al genial arquitecto, homenajeado este año en el Día das Artes Galegas. La muestra se puede visitar desde ayer en el Sexto Edificio del Museo, incluye material inédito sobre su etapa pontevedresa, uno de los atractivos que ayer coincidieron en destacar durante la presentación el director de la entidad museística, Carlos Valle, uno de los comisarios de la exposición, Rafael López Torre, y Juan de la Sota, hijo del artista y miembro de la fundación que lleva su nombre.

«Esta antológica recorre toda la vida y la obra de Alejandro de la Sota, con una primera parte en la que se muestra cómo él se construye a sí mismo, y una segunda parte en la que se ve como construye para los demás, de ahí el título Construírse/Construír», explicó Rafael López Torre, encargado de comisariar este proyecto junto con Teresa Couceiro, directora de la Fundación Alejandro de la Sota.

Ese enfoque, tanto en lo relativo a la parte más relacionada con la ciudad de Pontevedra como en la gran relevancia de la trayectoria del arquitecto, fue subrayado por Xosé Leal, quien aseguró que «Pontevedra se converterá na capital da Arte con maiúsculas este ano».

Carlos Valle indicó, por su parte, que «esta mostra ten un significado moi especial, despois de dous intentos previos de dedicarlle unha gran exposición a De la Sota». Recordó que el logotipo actual del Museo de Pontevedra está inspirado en un dibujo suyo. Y añadió que esta muestra cierra un círculo que se abrió cuando el padre del arquitecto, Daniel de la Sota Valdecilla, era presidente de la Diputación e impulsó la fundación del Museo provincial.

Su Pontevedra

«Mi padre toda la vida tuvo nostalgia de Pontevedra, de sus amigos, de su madre», aseguró Juan de la Sota. El hijo del arquitecto señaló que gracias a esta muestra se puede tener una visión del Alejandro de la Sota de los años 20 y 30 y de cómo fue su vida en Pontevedra, ciudad en la que nació, vivió y donde comenzó a fraguarse su vocación por la arquitectura. Una etapa de juventud que hasta ahora había pasado desapercibida, cuando él mismo dejó dicho que Pontevedra marcó de forma decisiva su personalidad y carácter. En esta ciudad mantuvo una especial amistad con el hijo y el sobrino de Castelao, «su maestro de caricatura y de óleo».

Esta parte de su etapa pontevedresa está basada sobre todo en imágenes, fotografías y dibujos que se exhiben por primera vez. La segunda parte de la exposición se centra en las obras emblemáticas de su carrera, como son el pueblo de Esquivel en Sevilla, el edificio de Correos de Léon, el Gobierno Civil de Tarragona o el gimnasio Maravillas de Madrid. La sala reserva un apartado especial al Pabellón de Deportes de Pontevedra y la Casa Domínguez en A Caeira. Estos proyectos se complementan con material bibliográfico, maquetas, dibujos y muebles diseñados por el propio Alejandro de la Sota.