La sequía afecta también a la fauna

María Hermida
maría hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

A LAMA

Ramón Leiro

Alimentan con paja al ganado mostrenco porque en el monte no tienen que comer

05 oct 2017 . Actualizado a las 11:55 h.

A Lama es uno de los concellos gallegos donde el ganado continúa pastando con cierta libertad, en el monte, sin horarios. O al menos lo hacía hasta ahora. No en vano, la sequía está afectando severamente a las reses mostrencas, que en la zona principalmente son vacas, a las que sus dueños tienen que llevar de comer paja o hierba seca porque en la naturaleza no les queda nada que llevarse a la boca. El pasto, sin lluvias que lo hagan crecer y reverdecer, es inexistente o está seco. Y, pese a ese alimento que le aportan los dueños, las vacas han adelgazado y algunas tienen las costillas bien marcadas.

A media mañana, Luis Vaqueiro echa paja a sus más de cien vacas, rubias gallegas y cachenas, en el lugar de A Grifa. Las tiene en un monte que está a más de 600 metros de altura, donde lo habitual es que a estas alturas las reses tengan pasto de verde sobra. Si eso, cuando hay que darles alimento extra es en invierno, cuando las heladas, las lluvias y la nieve hace que se queden quietas, guareciéndose allí donde pueden, y sin apenas salir a comer. Luis explica cómo está la situación: «Estamos mal, ahora mismo las vacas deberían estar comiendo muy bien al aire libre, cogiendo grasa para el invierno. Pero no está siendo así, están delgadas y eso que las estamos alimentando con paja, hierba seca o tacos de pienso. Si continúa sin llover en invierno vamos a tener mortandad de ganado seguro, porque no van a estar preparadas para pasar esos meses».

Luis señala que solamente en Xesta hay unas 500 cabezas de ganado de monte, pero que en todo el municipio de A Lama la cantidad es bastante mayor. De hecho, basta con recorrer las carretera del municipio para ir viendo ganado, sobre todo vacas rubia, en su mayoría intentando pastar en unos prados secos.

 

Los costes de producción, con las lluvias desaparecidas, se han disparado. Luis Vaqueiro explica que los que venden hierba la tienen a unos precios considerables porque «es la ley de la oferta y la demanda y este año todo el mundo la necesita porque no hay pasto verde».

¿Y la caza?

La situación pinta mejor para la fauna de menor tamaño. El conejo de monte, según indicaban ayer distintos cazadores, está resistiendo bien, desplazándose hacia zonas donde va encontrando comida. «O coello é un animal resistente, pode chegar ata a perder a metade do peso sen enfermar», indicaban. La temporada de caza, por ahora, pinta bien.

Los marineros de bajura de Portonovo topan atunes rojos «e iso non é normal que ocorra aquí»

Si se le pregunta a los responsables de algunos de las cofradías de la ría de Pontevedra señalan que, por ahora, la falta de lluvias y el calor que está haciendo les están beneficiando más que perjudicando, porque pueden trabajar en el mar sin contratiempos. Pero tanto la patrona mayor de Lourizán, María del Carmen Vázquez, como el responsable del pósito de Portonovo, José Antonio Gómez, señalan que están pasando cosas «moi atípicas» y que con toda probabilidad todo el cambio en la climatología les va a pasar factura más pronto que tarde. «Isto non vai dar en cousa boa, non hai revoltura, non hai mar de fondo», señala Gómez.

Empecemos por Portonovo. Gómez indica que por ahora la sensación entre la flota es de alegría porque se está pescando bien, sin temporales de por medio. Pero que los recursos están sufriendo cambios. «Nas redes dos nosos barcos, dos de baixura, están caendo atúns roxos e iso non é normal que ocorra aquí, esa especie, que é depredadora, pensamos que está vindo porque persegue ao cabalón, que este ano hai moito aquí».

Por su parte, la portavoz de las mariscadoras de Lourizán señala que la situación en el mar «parece máis de primavera que de outono. Estamos tendo agora algas cando o normal sería que as tivésemos meses atrás. Está todo moi cambiado e o marisco está desovando cando non lle corresponde. Non podemos dicir que polo de agora sexa algo negativo, pero as cousas están cambiando no mar, iso está claro. Espero que non veña a toxina no Nadal, pero como está todo cambiado...».