La titularidad de un camino, el cierre de una finca, la superficie de una parcela... Son disputas hasta cierto punto comunes en el rural pontevedrés y que, en alguna ocasión, han terminado de forma dramática. Aunque pudiera parecer que se trata de conflictos más propios de un pasado que del presente, lo cierto es que los juzgados de la provincia siguen tramitando, año tras año, denuncias penales que tienen como común denominador el enmarcarse en un conflicto de lindes.
Y la Audiencia de Pontevedra no es ajena a este tipo de pleitos, toda vez que en los últimos meses ha abordado varias causas de este ámbito.
Una de las más recientes se remonta a mediados del pasado octubre cuando los magistrados confirmaron la condena de novecientos euros de multa impuesta a una vecina de Pontevedra por un delito de daños. En este caso concreto, se consideró probado que la acusada, en abril del 2018, «excavó, desde su parcela, al pie del muro de la finca colindante», de tal modo que ocasionó unos desperfectos que, «probablemente con el paso del tiempo, darán lugar a que el cierre presente sobrecargas -grietas, inclinación...-», así como se determinó que existía riesgo de que se terminara desplomando «debido al desequilibrio provocado entre el peso del muro y la fuerza resultante del terreno».
Además de la multa, se le impuso el pago de una indemnización de 2.790 euros, cantidad que se corresponde con el coste de la restauración del muro.
También con una multa, pero de 180 euros, ha sido condenado por un juzgado de Cambados un matrimonio vecino de Sanxenxo acusado de un delito leve de amenazas. En su caso concreto, la resolución judicial de la Audiencia Provincial ratifica que, la tarde del 21 de octubre del año 2019, la víctima «fue en su tractor a recoger alimentos para el ganado a una finca de su propiedad en el lugar do Casal, en Nantes». En un momento dado, sus vecinos, «con los cuales tiene conflictos por el camino de paso entre fincas», se aproximaron al tractor.
Mientras la mujer lo insultaba y lo amenazaba con un «voute matar», su marido, que portaba en las manos un palo de madera afilado, lo invitaba a que se apeara del vehículo, al tiempo que le amenazaba de muerte.
Por estas mismas fechas, la Audiencia validó una sentencia de otro magistrado pontevedrés que castigó con multas a dos hermanos y a los hijos de uno de ellos, vecinos de San Vicente de Cerponzóns, por otro muro de la discordia. Tras aclarar que el citado muro se encuentra dentro de la finca propiedad del denunciante, la sentencia sostiene que, el 1 y el 27 de abril del 2017, excavaron «desde su finca la tierra que se encontraba debajo de la base de dicho muro de tal manera que este se ha desplazado desde su eje hacia el lado de la finca que se encuentra al nivel más bajo, con riesgo de caída».
Como consecuencia de estos hechos, se han localizado dos gritas ascendiendo los costes de reparación a cerca de cuatro mil euros. Al igual que ocurrió con el primero de los muros, esta cantidad es la que se consigna por parte de la Audiencia como indemnización.