Un delincuente vial suma 3 años de cárcel por lesionar a policías durante su huida al volante

m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

El acusado mostró su conformidad en una conexión por videoconferencia desde la cárcel de Pereiro.
El acusado mostró su conformidad en una conexión por videoconferencia desde la cárcel de Pereiro. Teresa Cela

El acusado, cocainómano, está preso por otras causas y ahora añade una condena por cinco delitos cometidos en Ourense

19 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Embistió a agentes, coches y motos policiales, conduciendo temerariamente desde el barrio de Covadonga hasta A Ponte, poniendo en peligro a viandantes y causando lesiones a los que le salieron al paso y trataron de detenerle. Por esta conducta, sumará tres años y medio más de reclusión. Se encuentra ya preso en el centro penitenciario de O Pereiro de Aguiar por otros asuntos, que según él mismo calculó, le mantendrán al menos cinco años entre rejas. Era reincidente en uno de los delitos por los que compareció como acusado en el Juzgado de lo Penal 1 de Ourense este miércoles. Lo hizo por videoconferencia desde la cárcel y para dar su conformidad al acuerdo con la Fiscalía por el que se reconoce autor de cinco delitos cometidos aquella noche del 6 de septiembre del 2019 en las calles de Ourense. La fiscal modificó su escrito provisional de acusación para introducir la atenuante análoga de drogadicción, pues el procesado padece una grave adicción a la cocaína que limita sus facultades.

El autor confeso circulaba por la calle Júpiter al volante de un coche que no era suyo ni tenía seguro. Un agente uniformado le requirió que se identificase. Sin embargo, el conductor reaccionó maniobrando para huir y obligando a un policía a apartarse para no ser atropellado. Había otra patrulla de apoyo en la zona, con agentes de paisano y en un vehículo sin indicativos bloqueando la vía. El conductor chocó contra este coche mientras huía y causó lesiones —sendas contracturas cervicales— a los policías que estaban en el interior del turismo camuflado, que también sufrió daños.

La peor parte se la llevó otro policía que iba en moto, pues el acusado invadió, intencionadamente según las acusaciones, la trayectoria del vehículo de dos ruedas. El motorista, un inspector, salió despedido y sufrió desgarro de menisco, contusión en una rodilla, torceduras y traumatismos superficiales en una mano. Después, el acusado continuó su marcha, a gran velocidad y saltándose semáforos, siendo perseguido por cuatro calles, hasta que los agentes desistieron por el peligro para los viandantes. Finalmente, el acusado fue localizado una hora después en una parrillada.

Por estos hechos, se le condena a seis meses de prisión por conducción temeraria, dos años de cárcel por atentado y lesiones a los agentes, seis meses más por negarse —después de su detención, en la comisaría— a someterse a la prueba de alcoholemia y tres meses por cada uno de los dos delitos de lesiones a los agentes no uniformados. Por los daños al coche deberá pagar una multa.

El consorcio de seguros pagó indemnizaciones de los policías lesionados: 4.049, 1.205 y 11.090 euros, respectivamente.