Un misil de Esquerdo doblega al Cornellá y refuerza al Arenteiro (1-0)

Tres más. Currados y con una demostración de carácter. El Arenteiro igualó los 17 puntos del Cornellá con un latigazo de Vicente Esquerdo que derribó el muro catalán. El colchón con respecto a la franja de descenso es ya de 7 puntos, a falta de los partidos del domingo. El 1-0 vale su peso en tranquilidad.

Javi Rey tenía claro desde la previa que a su equipo le tocaría picar piedra ante un enemigo bien organizado en los deberes defensivos. Así, el juego comenzó espeso. Los visitantes ahogaban con su presión alta y los carballiñeses tardaron doce minutos en hacer trabajar a Yari, que se adelantó plácidamente a la llegada de Marquitos al espacio.

Los de Espiñedo necesitaban precisión en las llegadas y otra vez el meta ucraniano de su oponente se elevó por encima de Manín, que esperaba con la caña un buen servicio de Jordan. Por entonces, los verdes ya habían descubierto una vía expedita en su costado zurdo, donde Álvaro Ramón se asociaba con Marquitos, sin que el veterano Canario regresara a tiempo. En el otro flanco, el desborde de Pibe anclaba a Eudald, convertido en su sombra. Los barceloneses, en todo caso, no relajaron sus pegajosas marcas y Luisao Macías rubricó su primer tiro a puerta, que se fue desviado.

La estrategia, a través de la pegada del mencionado Canario y de sus espigados rematadores, era otra credencial para los forasteros, en un duelo que se descosió en los minutos previos al descanso, con un golpe recibido por Luis Chacón, quien sangró por la nariz, y las molestias del arquero Diego García, que cortaron el ritmo. Con menor concentración defensiva, Pibe obligó a Yari a una espectacular estirada, tras un cambio de orientación de Esquerdo, y Álvaro Ramón también se coló hasta la cocina, sin que su pase llegara a Manín en la boca de gol, al cruzarse su vigilante.

El decorado no varió en la reanudación, pero el Arenteiro dotó a sus acciones de algo más de chispa. Los barceloneses, a lo suyo, intensos en la presión y dispuestos a salir como flechas, aunque nunca encontraban a su referente en punta, Mamor Niang. Echaban de menos a su goleador Clau Mendes y después lo intentaron con los más livianos Carles Garrido y, más tarde, Álex Gonpi.

Tiago no logró rematar bien una entrega de Pibe desde la línea de fondo y Álvaro Ramón también lo intentó en un centro chut desde su carril, antes de que los barceloneses comenzaran a sacudirse el control local. En esos momentos en los que parecían capaces de avanzar líneas, un balón al área de Luis Chacón fue rechazado en corto por Andreu Hernández y lo cazó Vicente Esquerdo, que no tardaba en armar su zurda y golpear con violencia y clase un esférico que se alojó en el fondo de la jaula.

Pesó a partir de ahí el recuerdo de los dos puntos que volaron frente al Fuenlabrada y Javi Rey apuntaló su retaguardia. El once verde cerraba bien el choque, aún con los sustos de dos disparos de Carles y de Adam, que tapó bien un Diego bien colocado. Son ya cuatro partidos seguidos sumando y un paso más para asentarse en la categoría.

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