Los valdeorreses vieron como los de A Porta Santa empataban en la segunda mitad con un hombre menos, pero Juanito Bazo dejó los puntos en casa
01 dic 2019 . Actualizado a las 22:08 h.Un reñido encuentro terminó con el triunfo del Barco sobre un Paiosaco que creó problemas incluso con diez hombres en la segunda mitad: 3-2.
El primer período fue de color local y aunque Otero intimidó con la primera opción visitante, un aviso de Íñigo Pisón precedió al remate a gol del mismo delantero, que aprovechó a los once minutos un buen centro lateral de Ordóñez. Pero en un despiste local, Otero le robó la cartera a su par y logró la igualada antes de cumplir los primeros veinte minutos. Ivi Vales y Juanito Bazo, derribado por el portero fuera del área, volvieron a rondar el gol en un partido que volvía a encarrilar para los anfitriones un David Álvarez que lucía su habilidad en los libres directos.
El 2-1 parecía poca renta, pero la expulsión de Otero al inicio del segundo período hacía presagiar un partido más plácido para los valdeorreses. Lejos de hundirse los verdiblancos movieron mejor el balón y al filo de la última media hora, Iván Amor empató con un chut seco y raso, imposible para Oviedo.
Manolo movió piezas de inmediato y buscó mayor fluidez en ataque con Moreira y Tato. El asedio contra diez fue notable y se contabilizaron oportunidades de Juanito Bazo, Moreira y David Álvarez. A la postre, el gol llegó cuando quizás menos se esperaba, tras varios rebotes que a la postre cazó el ariete andaluz, Juanito. Quedaban poco menos de diez minutos y los visitantes ya no pudieron impedir el triunfo de los de Calabagueiros.