La Cámara de Comercio gastó casi el doble de lo que ingresó en 2012

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Miguel Villar

Un informe alerta de la «incertidumbre» en la entidad con la nueva ley

28 may 2013 . Actualizado a las 07:30 h.

La financiación se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para la Cámara de Comercio de Ourense y el anteproyecto de la nueva Ley de Cámaras no parece que vaya a ser una solución a esas dificultades de tesorería. Así se desprende el informe que ayer presentó la directiva de la entidad cameral al pleno. El documento concluye que la nueva normativa mantiene la «incertidumbre al no concretar la financiación». De hecho, la institución que preside Celso Barbosa presentará, a través del Consello Galego de Cámaras, una batería de alegaciones contra el anteproyecto en el que trabaja el Gobierno central.

Desde la entidad ourensana se cuestiona que se mantengan como voluntarias las aportaciones de las empresas y se incrementen, sin embargo, las funciones que debe realizar la cámara. Entre los nuevos cometidos está el de apoyar la internacionalización o tener un papel más activo en la nueva formación profesional dual. Además, el texto normativo mantiene para las cámaras el carácter de corporaciones de derecho público, pero no se les conceden encomiendas de gestión, lo que cierra las puertas, según fuentes de la Cámara ourensana, a vías de financiación a través de las diferentes administraciones con las que solo podrán firmar convenios.

En la sesión plenaria de la Cámara se presentaron también las cuentas del 2012, que presentan unos números rojos que hablan de la delicada situación que pasa la entidad al gastar casi el doble de lo que ingresaron. Así, el último año se cerró con unos ingresos de 573.164 euros, lo que supone un 63,31 % menos que en el 2011. Esta merma se debe a que en el 2012 solo contribuyeron al presupuesto las empresas con una cifra de negocio neto igual o superior a los diez millones. La caída de estos ingresos fue amortiguada, aunque solo en parte, por el incremento de los recursos no permanentes; es decir aquellos obtenidos por el cobro de servicios y que durante el 2012 aumentaron hasta en un 81,99 %. En el capítulo de gastos hubo una considerable rebaja (22,15 %) al cerrarse en 1.033.000 millones.

El cuadro del expresidente

Las cuentas solo tuvieron un voto en contra, el de Jorge Bermello. Según trascendió, el excandidato a la presidencia hasta cuestionó el gasto en enmarcar un cuadro del último expresidente en la sala de juntas, que tiene el de todos los que lideraron la institución, incluido el padre de Bermello.