Humanos

Marta Vázquez A

OURENSE

12 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

l contrario de lo que ocurre con la materia y la energía, que salvo excepciones se comportan de manera previsible, el hombre acostumbra, también salvo excepciones, a comportarse de forma impredecible. Es decir, de forma humana.

Lo digo porque estos días viendo el despliegue de expertos científicos, medios de comunicación y fuerzas del orden que esperan a que la erupción volcánica de la isla de El Hierro se produzca, pienso en lo fácil que podría ser controlar e incluso evitar los incendios forestales que soportamos cada año en Galicia, y sobre todo en Ourense.

A ver. Si sabemos que en cuanto brilla un poquito el sol y escasean las lluvias van a empezar a arder los montes, bastaría con dar la voz de alarma y desplegar a científicos y expertos en el tema, incluso al ejército, para que montasen aquí una base y se dedicasen a vigilar. Igual hasta se podría inventar tecnología punta que predijese cuándo y dónde.

El problema es que predecir estos fenómenos no parece fácil. En esta tesitura, sería necesario desplegar un efectivo por cada metro cuadrado de suelo porque, por lo que hemos visto en los últimos meses, los incendios forestales surgen a cualquier hora del día, en cualquier punto y, lo que es peor, sin motivo aparente.

Temo que no podrá ser por que, al fin y al cabo, las erupciones volcanicas no dependen de la accion humana, mientras que los incendios ocurren porque alguien enciende una cerilla. Tampoco nos vamos a engañar.