Los héroes y los responsables

eduardo vázquez martul

OPINIÓN

Solamente un Stop advierte a los conductores que quieran cruzar el paso a nivel de Recimil, en Lugo, donde se produjo el choque mortal
Solamente un Stop advierte a los conductores que quieran cruzar el paso a nivel de Recimil, en Lugo, donde se produjo el choque mortal Laura Leiras

13 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

hoy, dos fallecidos y una persona grave atrapadas bajo un tren en un paso a nivel. Sin semáforo, ni barreras, a pesar de reclamaciones de vecinos que tienen que usar este paso de muerte. Seguro que la autoridad responsable investigará las causas para resolver el problema para que no vuelva ocurrir. A las familias de los fallecidos, el pésame, buenas palabras, alguna cara compungida, pero a los muertos nadie les devolverá la vida. Quizás pongan una placa, un día de luto oficial y algún discurso. Es la historia diaria en nuestro país. Quizás, no me extrañaría la falta de contestación o resolución a la demanda vecinal. Aún existe el silencio administrativo, que tapa la inoperancia. Pasa lo mismo en los trazados peligrosos de nuestras carreteras. Habrá que enterrar a un número, fatídico número, para que el organismo competente admita que no siempre el conductor es el culpable. Mucho trabajo de despacho, pero poco trabajo de campo. Me acuerdo de uno de mis viajes a un país de referencia. Llovía a mares, la carretera estaba cortada, Salimos del coche y vimos entre el barro de la obra, a uno con un casco de diferente color. Pregunté a quién correspondía. Me contestaron: es el ingeniero jefe. Es demasiado frecuente que el responsable o el director no esté en la zona caliente en este tan sufrido país que genera tantos héroes ocultos que necesitan morir para que cambien los errores. Creo que en nuestro país se sigue pagando por estamento, los más altos ocultos en sus despachos, y no por grado de responsabilidad que exige palpar el problema. Al final el responsable siempre es la circunstancia, el mal tiempo o el que cruzó la vía. No se resuelve el problema, porque nuestros dirigentes no pisan la calle, allí donde está el problema que debería estar diagnosticado antes de la fatalidad. Quizás sea una causa por lo que el último debate no resolvió las dudas del ciudadano. Una política en donde la línea de la verdad y la mentira no existe. La mentira es un pecado venial.