A quemarropa

Luis Ferrer i Balsebre
Luis Ferrer i Balsebre MIRADAS DE TINTA

OPINIÓN

Sandra Alonso

09 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Salió el sol, abrieron la jaula y la gente salió a la calle como si no hubiera un ayer, desnudos de precaución, exponiendo el alma a los disparos a quemarropa de la nueva anormalidad.Aromas primaverales, cañas, vinos, tapas, rapaces y rapaciñas ventureiras devorando hamburguesas y dilapidando sensualidades pálidas de sol; talludos enmascarados, mascotas desorientadas, bicicletas tuneadas, patinetes, paseantes tempraneros, motoristas de cascoporro y ancianos armados de anticuerpos tan perplejos como las mascotas, saboreando una libertad sin permiso pernocta.

A quemarropa recibimos la vida al aire libre, las pasiones adormecidas, sonrisas olvidadas, entusiasmos oxidados y algunos virus camuflados en amistades cercanas que nos recordarán en unas semanas que aún no le hemos ganado el pulso.

A quemarropa sufrimos la gala distópica de los Goya -¿vale la pena insistir en mantener un rito sin sacerdotisas de cuerpo presente?-, las manifestaciones cojitrancas de un Día de la Mujer descafeinado, las cifras del paro por venir, la mudanza del PP (Kavafis: «Maldices la ciudad: dónde quiera que vayas la ciudad irá contigo»). Las polémicas gubernamentales y judiciales de una ley Trans a un tris de hacer un tras por confundir churros con meninas.

A quemarropa amenaza Villarejo -nuestro 007 furtivo- apuntando con el parche del ojo bueno balas de plata a diestra y siniestra.

A quemarropa siguen quemando Barcelona sin que el buenismo estratégico admita un caos que acabará asolando Cataluña y arrastrándonos a todos al mismo cabreo secular.

A quemarropa y volapié se vacunaron las infantas creando anticuerpos antimonárquicos que favorecen infecciones republicanas.

Y salimos a la calle huérfanos de buenas noticias y responsabilidad, con las balas rozando las mascarillas y silbando entre carcajadas y angustia contenida, soñando una Semana Santa de pasión en la que no se morirá Cristo, sino más de trescientos ciudadanos diarios.