Un algoritmo es, en síntesis, una secuencia de instrucciones. Por ejemplo, para multiplicar dos números de varios dígitos existe una secuencia de acciones (algoritmo) que todos conocemos. Resulta que una fotografía de un cocido gallego, subida a Instagram el año pasado, fue censurada y eliminada temporalmente. Ante las reclamaciones y protestas, le echan la culpa al algoritmo, aunque este no tiene culpa de nada. En todo caso la tendrían las personas que han diseñado el algoritmo. En Instagram (La Voz, 24-10-2019) usan una combinación de inteligencia artificial e informes elaborados por personas para identificar publicaciones. Pero algo debió de fallar. No aceptan violencia gráfica, lenguaje que incita al odio, acoso y bullying, y desnudos y actividad sexual. Una foto de un cocido no encaja en ninguno de estos apartados, aunque, es verdad, existe mucha carne. A pesar de todo, la foto del cocido fue eliminada por el maldito algoritmo.
El cocido gallego forma parte de la dieta atlántica, es una seña de identidad de Galicia y su contribución al aumento del colesterol es escasa. En primer lugar porque la frecuencia de consumo es muy baja. Además, usando tablas de composición de alimentos, se puede calcular, aproximadamente, la cantidad de colesterol que se ingiere en un cocido súper: rebasa ligeramente los 500 miligramos. Un par de huevos aportan 750 mg de colesterol. ¡Vivan los carnavales!