Sospechosas unanimidades

César Rodríguez Pérez
César Rodríguez JUEGO DE TRONOS

OPINIÓN

23 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

En tiempos de profunda crispación, las unanimidades se vuelven sospechosas e invitan a la desconfianza. En ocasiones, como la iniciativa en el Parlamento gallego para que las faldas dejen de ser obligatorias en uniformes escolares, no hay trampa ni cartón. En otras, como la que tiene que ver con la ley de protección de datos que acaba de aprobar el Senado, las sombras son más alargadas que la de aquel ciprés que hizo inmortal Delibes. ¿Por qué? Pues porque concede a los partidos barra libre para rastrear datos personales y opiniones políticas de los votantes sin necesidad de consentimiento. Y aun encima les permite usarlos con fines electorales y a través de aplicaciones de mensajería instantánea.

Es un escándalo, que legaliza prácticas tan peligrosas como las realizadas en Estados Unidos por aquel infame submarino ultraderechista llamado Cambridge Analytica (el del brexit y Trump). Las eminencias grises de los partidos tendrán a su disposición formidables herramientas de escucha y propaganda. Intentarán seducir a ciertas capas del electorado metiendo miedo y usando jergas, pero no atendiendo sus necesidades. Los portavoces sonarán aún más polarizados, populistas y populacheros. Y quien no quiera crispación, que se prepare para tomar dos tazas al toque.