El suprahombre y el pitorreo

Xose Carlos Caneiro
Xosé Carlos Caneiro EL EQUILIBRISTA

OPINIÓN

04 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Fue su primera rueda de prensa en solitario. La primera. La de Él, que tanto le criticaba a Rajoy que no apareciese más en los medios, cuando los medios, especialmente las televisiones de barricada alentadas por la izquierda, decían día sí y día también que España era un país en ruina, sin democracia y asolado por la corrupción. Qué tiempos. Todo cambió en un par de meses. Estamos en una nueva época. Lo dijo ayer el presidente al que nadie ha votado. Que ni es diputado. El presidente que gobierna, o algo parecido, con ochenta y cuatro diputados. También dijo, literalmente: «Los ciudadanos se reconocen en su gobierno». Algunos no. Los que saben que todo es propaganda. Que la mentira y el simulacro se han adueñado de España. Es su estrategia: repetir una falsedad hasta convertirla en aparente certeza. Imagino que ya saben ustedes, mis cultos lectores, quién fue el que acuñó esta célebre frase: «Una mentira repetida mil veces se convierte en verdad». Porque ni España ha inaugurado una nueva época ni nos sentimos representados, la mayoría, en un gobierno que no hemos votado. Que nos dejen manifestarnos. Que nos permitan votar. Eso es la democracia. Pero no, prefiere las gafas de sol en el avión gubernamental, la fotografía, el cliché, y las ruedas de prensa a cuentagotas. En propaganda nadie puede superarlos. Ayer hasta se permitió el lujo de aparecer con corbata morada. Era la tomadura de pelo definitiva a los que lo han puesto ahí, los de Podemos. Es su color. Y Sánchez se puso esa corbata para mofarse de estos que, perdiendo votos por su error gravísimo al apoyar la moción de censura, lo hacen crecer. Pero no tanto. Lo del CIS de esta semana es una broma (¡otra!) de Tezanos, el socialista sociólogo que han puesto al mando de las encuestas oficiales. Si el PSOE le sacase diez puntos al segundo, las elecciones las convocaría hoy mismo. Otra mentira. Sánchez, Él, una metáfora del suprahombre del que nos hablaba Nietzsche: un individuo capaz de identificar su palabra con lo bueno, el que se sitúa por encima del bien y del mal. Nietzsche escribió su Así habló Zaratustra para mostrarnos al suprahombre. Sánchez solo precisó su primera rueda de prensa. La de ayer. Mientras lo observaba en el televisor veía todo lo que no pude ver cuando leí al filósofo alemán. Hablaba de las tres metamorfosis que debe experimentar el ser humano para convertirse en Übermensch. Antes tendría que ser camello, luego león y finalmente niño. Yo creo que Sánchez ha sufrido las tres transformaciones en una sola. El es camello (el que carga), león (el que se rebela) y niño (al que solo le queda futuro) a un tiempo. Que este madrileño haya llegado al gobierno de España parece una chanza. Su corbata morada puso ante los ojos del mundo la verdad: todo es un pitorreo.