Cuenta La Voz que en Madrid, desde la gestora socialista, se preguntan qué hacen con Galicia. Y yo cito al maestro Samuel Johnson: «El que aguarda para hacer mucho de una sola vez, nunca hará nada». Johnson también decía que cuando nada se puede hacer, lo mejor es rezar. En Los pilares de la Tierra, el prior Philip deseaba transformar Kingsbridge en una ciudad espléndida. No era fácil: la guerra civil se estaba extendiendo por doquier y pocas esperanzas abrigaba Inglaterra. Ken Follet, el autor de Los pilares tiene sus adictos. Hasta uno mismo, que cada vez cree más en Ken Follet y menos en Pérez Reverte. En la novela medieval de Follet también se cuenta, creo recordar, un viaje por el camino de Santiago. Por allí deben ir en peregrinación los candidatos a las primarias del PSOE. Y reflexionar. Porque este PSdeG es su espejo: derruido, sin posibilidad de ser lo que fue cuando Isidoro no quería llevar corbata. A mí me gusta aquel PSOE, tantas veces muerto. Hasta lo voté. Este, el de las gestoras, huele a naftalina. Solo pensar que sus votos de izquierda se los lleva Iglesias, el asesor de Maduro y la Venezuela en ruinas, me solivianta. El PSdeG no puede seguir en estas manos. Cuando nada se pueda hacer, decía Johnson, recen. Al PSdeG no le va quedando más remedio.