08 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.
La detención de cuatro presuntos pedófilos en Galicia pone de manifiesto de nuevo la existencia de un submundo terrible que convive con nosotros. Resulta difícil entender y asumir la presencia de criminales tan desalmados, pero la sociedad no puede relajarse con semejantes monstruos. Más que nunca hay que exigir a las autoridades que velen por la seguridad de los niños. Sí o sí.