Debajo de la alfombra

Ruth Nóvoa de Manuel
Ruth Nóvoa DE REOJO

OPINIÓN

23 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Tiene que servir de algo. No puede ser de otro modo. La convulsión que supone cada novedad de la operación Pokémon tiene que tener alguna consecuencia positiva. Y no me refiero a la asunción de responsabilidades por parte de los investigados, si así lo determina lo Justicia. Tampoco a la que podría planear sobre la jueza si, como insisten los partidarios del exalcalde de Ourense, las imputaciones se diluyen y sus actuaciones se tornan entonces excesivas. La operación Pokémon -en realidad todas las que ponen bajo el foco la corrupción- debe lograr que el que quiera meter la mano en la caja (en cualquiera de las múltiples modalidades de esta actividad) se lo piense más de una vez. Que no crea que saldrá impune. Que sepa que puede haber alguien que levante la alfombra. Y se lo encuentre.