Venus en tránsito

| JUAN CARLOS MARTÍNEZ |

OPINIÓN

08 jun 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

CUANDO se producen acontecimientos impactantes en cascada, como estos días, llega el exceso de información, la confusión o, más finamente, la entropía, término sacado de la física y que alude al desorden que se produce en los sistemas, incluidos los sistemas de gobierno. Por eso hay que aclarar que el tránsito de Venus ha sido un asunto de los planetas, de interés para niños y científicos (o sea, gente de mente despierta), no el tráfico extraordinario que se genera los fines de semana en torno a esos bares de carretera con luminosos de colores, ni tampoco el paso de Magdalena Álvarez por Galicia, aunque buena parte de la clase política la esté viendo como esa mancha que oscurece parcialmente el sol de los grandes planes de infraestructuras; si se tratara de un acontecimiento político asistiríamos más bien al orto de Marte, patrón de la guerra, porque estamos otra vez con los dientes crujiendo y los trastos por el aire, como antes de la risueña era ZP. Se nos pasará, probablemente, a partir del 13 de junio.