Fallece a los 91 años Quincy Jones, el rey Midas de la música popular

Miguel Lorenci MADRID / COLPISA

OBITUARIOS

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El legendario músico, compositor y productor estadounidense, fue artífice de discos como «Thriller» de Michael Jackson y compuso para Frank Sinatra o Ray Charles en una extensa carrera

04 nov 2024 . Actualizado a las 11:01 h.

Todo lo que tocaba Quincy Jones en el planeta de la música se convertía en oro. El legendario músico, compositor y productor estadounidense ha fallecido a los 91 años. Con él la música pierde uno de sus mitos, protagonista de una larguísima carrera jalonada de éxitos. Jones falleció el domingo rodeado de su familia en su casa de Los Ángeles, según ha comunicado este lunes su representante, Arnold Robinson.

Fue trompetista, director de orquesta, arreglista, compositor, productor musical y audiovisual y ganador de 28 premios Grammy. Bono, el líder de U2, calificó como «la persona más genial que he conocido» a una de las figuras más versátiles y respetadas de la música del siglo XX.

Produjo los álbumes superventas Off the Wall, Thriller y Bad de Michael Jackson en la década de los ochenta, discos que convirtieron al cantante en la mayor estrella pop de todos los tiempos. Thriller vendió hasta 70 millones de copias, y seis de las nueve canciones del álbum estuvieron en el 'top ten'. Su primer sencillo de éxito había sido It's My Party, una canción de Lesley Gore que encabezó la lista de éxitos del pop estadounidense en 1964.

También compuso para gigantes de la canción ligera como Frank Sinatra. Hizo los arreglos del Fly Me to the Moon, del que el astronauta Buzz Aldrin hizo sonar una grabación en casete durante el primer alunizaje en 1969. Dotado intérprete de trompeta y piano, fue director de orquesta y arreglista para todo tipo de intérpretes y tocó todos los palos: del disco sound de Donna Summer, a jazz como productor de Aretha Franklin, Sarah Vaughan, Ray Charles, Count Basie, Dizzy Gillespie. Muchos otros solistas y cantantes colocaron sus temas en lo más alto de las listas de éxitos gracias a él, como Tommy Dorsey, Dinah Washington, Nat King Cole, Paul Simon, Amy Winehouse y Barbra Streisand.

Fue también compositor de decenas de bandas sonoras para películas. Incansable trabajador en el estudio y virtuoso en el manejo de egos desmedidos como Miles Davis o Sinatra, formó en 1985 el mayor conjunto de superestrellas que grabó el álbum de recaudación de fondos We Are the World, para ayudar a los afectados por la hambruna en el mundo con la canción de mayor éxito de su época.

Su compañía de producción de cine y televisión, fundada en 1990, tuvo un gran éxito con la comedia El príncipe de Bel-Air, que lanzó la carrera de Will Smith, y con otros programas. Coprodujo también la película El color púrpura, y continuó innovando hasta bien entrados los 80 años, lanzando Qwest TV en el 2017, un servicio de televisión musical a la carta.

Tras Beyoncé y Jay-Z, Jones era el tercero con más cantidad de nominaciones a los premios Grammy de todos los tiempos (80 frente a las 88 de ambos artistas) y es el tercero más galardonado, con 28 premios.

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Nieto de esclavos

Nieto de una esclava de Louisville, Quincy Jones nació el 14 de marzo de 1933, en Chicago, Illinois. Hijo de Quincy Delight Jones y de Sarah Frances Wells, su padre fue un jugador semi-profesional de béisbol y carpintero. Su familia se trasladó a Seattle cuando contaba con 14 años.

Experimentó con diferentes instrumentos en la banda de la escuela antes de decidirse por la trompeta para tocar jazz, música popular y rhythm and blues en clubes nocturnos de soul con formaciones como la Lionel Hampton's big band y en la banda de la Berklee School of Music en Boston. Conoció a Ray Charles a los 16 años, quien le enseñó a arreglar y componer música.

En 1950 se instala en Nueva York donde se dedicó a escribir, arreglar y grabar a bandas que tocan en los clubs de jazz en los que se relaciona con Thelonious Monk, Charlie Parker y Miles Davis Con la Hampton's band. Realizó una gira europea y americana a mediados de la década de 1950 antes de trasladarse a París y estudiar composición clásica con Nadia Boulanger. Trabajó luego como director musical de Barclay Records y también como compositor y arreglista.

Empresario

En 1961 regresa a Nueva York y se convierte en vicepresidente de Mercury Records, uno de los primeros afroamericanos con tanto poder en la industria del disco y produce a Peggy Lee, Tony Bennett y Sarah Vaughan. En 1963 Jones recibe el primer Grammy por los arreglos de I Can't Stop Loving You.

«La motivación subyacente de cualquier artista, ya sea Stravinsky o Miles Davis, es hacer el tipo de música que quiere y que todo el mundo la compre», dijo Jones a la revista Rolling Stone después de que los puristas del jazz lo calificaran de vendido por hacer música pop.

«La música era lo único que podía controlar», escribió Jones en su autobiografía. «Era el único mundo que me ofrecía libertad... No tenía que buscar respuestas. Las respuestas no estaban más allá de la campana de mi trompeta y de mis partituras garabateadas a lápiz. La música me hizo pleno, fuerte, popular, autosuficiente y genial».

Su carisma y su agenda eran impagables y trató a algunas de las figuras más conocidas del siglo XX: de Pablo Picasso, al papa Juan Pablo II, o Nelson Mandela, a quien ayudó a celebrar sus 90 años. También a Marlon Brando cuando el actor se recuperaba de una crisis nerviosa, retirado a su isla del Pacífico Sur.