La política es una fuente de innovaciones dialécticas, algunas muy tristemente conocidas como «miembra», gran aportación para mayor gloria de la lengua española. Pero no sólo son los términos, sino los conceptos. El gobierno de Lara Méndez ha creado la «inauguración anticipada», un disparate que no le traerá la menor consecuencia porque en Lugo somos así de indolentes.
Esta figura consiste en inaugurar una instalación y después cerrarla a cal y canto para que nadie la pueda disfrutar. Es el caso de la cloaca romana, inaugurada oficialmente el 20 de diciembre y a la que justo después se le echó la llave.
En la web municipal se puede leer, en una noticia del 20 de diciembre, que la actuación en el barrio del Carmen «se complementó con la recuperación y puesta en valor de la Cloaca Romana, que ahora será visitable por toda la ciudadanía, con el objetivo de que tanto el vecindario lucense como los turistas y visitantes puedan realizar un viaje al mundo enterrado de la ciudad romana de hace 1.700 años, conociendo la cloaca original en buen estado y en su localización real». Pues es falso, «ahora» no es visitable, como denunció La Voz de Galicia.
Hay que reconocerles que la estrategia es redonda. Anuncian cosas a lo loco y, como la mayoría de la gente se fía del titular y después sus inquietudes culturales son las que son y tienen poco interés en hacer la visita a los restos arqueológicos, el efecto es favorable. Puede que pierdan algún apoyo de los «listillos» que quieran visitar la cloaca, pero como en su mayoría son turistas o personas con un cierto grado de preparación, les importa un carajo porque entienden que ya no les votaban.
Veremos si le pasa como al centro de energías del Ceao, que costó una fortuna y en vez de generar energía la consumía... y no pasó nada. Lugo es así.