Cohetes mañaneros en honor a la Muralla

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS LUGO / LA VOZ

LUGO

Orozco. lanzando un cohete el 30 de noviembre del 2000 ante otros concejales, para celebrar el título logrado por la Muralla
Orozco. lanzando un cohete el 30 de noviembre del 2000 ante otros concejales, para celebrar el título logrado por la Muralla PRADERO

El Concello celebró el título concedido por la Unesco lanzando bombas de palenque

05 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Despertarse con cohetes a las ocho de la mañana un jueves laborable no es muy normal. Pero tampoco resultó normal en Lugo el 30 de noviembre del 2000, pues en la madrugada de ese día, hace 20 años, se supo que la Muralla de Lugo había sido declarada por la Unesco Patrimonio de la Humanidad. Así se explica que quien interrumpió el sueño de muchos fuese ni más ni menos que el alcalde, José López Orozco. A las puertas de la Casa do Concello y acompañado de concejales tan madrugadores como él, lanzó una bomba de palenque.

Una hora después repicaron las campanas de iglesias de la ciudad, y luego se sucedieron actos de celebración y felicitaciones a la ciudad por el logro alcanzado: por ejemplo, miembros de Protección Civil repartieron carteles y desplegaron carteles con el lema «A Muralla de Lugo, Patrimonio da Humanidade», un grupo de gaiteiros contratado por el Concello hizo un pasacalles y hasta funcionarios municipales y ediles compartieron un ágape en el edificio administrativo del Concello.

Y como aquel 30 de noviembre no fue normal, el alcalde, varios concejales y el delegado de Cultura, Antonio Calvo, habían pasado la noche casi en vela, a la espera de la noticia que al fin se confirmó. Y la alegría estalló.