Ni el Concello ni Fomento parecen tener planes para la consolidación del talud
25 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Los desprendimientos de tierra y piedras del talud sobre la N-VI y la calle Santiago a la altura del parque Marcos Cela, en la capital lucense, no son los primeros que se producen en esta zona, pero sí son claros indicadores de la necesidad de que Fomento y el Concello acometan las necesarias obras de consolidación del terreno allí donde le corresponde a cada uno. Los desprendimientos registrados hasta el momento no son especialmente relevantes, pero no por ello dejaron de entrañar riesgo tanto para el tráfico rodado (caso de la N-VI) como peatonal (calle Santiago, en el acceso al citado parque).
Los restos de roca desplomados sobre la escalera de acceso al parque Marcos Cela desde la calle Santiago (en teoría este acceso está cerrado, pero se sigue usando) son los suficientemente grandes como para provocar un accidente de muy graves consecuencias de haber atrapado a alguien.
En todo el tramo comprendido entre el nuevo puente blanco sobre la N-VI y el cruce con la segunda ronda en la calle Santiago se precisa una revisión del terreno, labores de consolidación y drenaje que eviten que, en temporadas de lluvia, se reproduzcan los desprendimientos de tierra.
La calle Santiago es actualmente titularidad del Concello, después del convenio por el que Fomento se encargó de la mejora de esta vía, antes de perder la condición de travesía urbana. Pero no tocó al talud. Sobre él se levantó un edificio, a la altura en la que se produjo el desprendimiento de tierra recientemente; a pocos metros, se encuentra la pasarela que permite conectar el Marcos Cela con el espacio verde acondicionado en su día frente al palacio municipal de los deportes. El Ministerio de Fomento estudia pedir al Ayuntamiento que mejore el drenaje del parque Marcos Cela, para evitar las escorrentías.