La sombra de Miguel Hernández cobija a Serrat

LUGO

El cantante inició en Pontevedra la gira gallega de su disco dedicado al poeta de Orihuela, protagonista del concierto

01 may 2010 . Actualizado a las 03:18 h.

La anterior ocasión en que había actuado en Pontevedra, Serrat lo hizo acompañado de Sabina. Aquellos dos pájaros de un tiro llenaron hace tres años la plaza de toros de la ciudad del Lérez, aunque un error de cálculo en el aforo también dejaba a las puertas del coso a centenares de personas con la entrada en la mano. El de ayer fue un concierto muy diferente, intimista y sin sobresaltos, si exceptuamos el retraso de 25 minutos en su inicio, pero de nuevo el cantante de Poble Sec no quería para sí todo el protagonismo, sino que se lo cedió a su admirado poeta Miguel Hernández. En su madurez creativa, Serrat se ha vuelto a sumergir en los poemas del autor de Orihuela para repetir homenaje a Hernández en el centenario de su nacimiento. Hijo de la luz y de la sombra es el resultado de esta relectura musical de trece poemas, que el cantante realiza 38 años después del anterior disco dedicado a Hernández. Era pues, de antemano, un concierto cerrado sobre ambos trabajos y, en palabras del propio Serrat, «monográfico». «No admite otras canciones, sé que lo entenderán y yo se lo agradezco. En otra ocasión me comprometo a traer un concierto de discos dedicados», dijo. Los acordes de La palmera levantina, Cerca del agua, Dale que dale, Canción del esposo soldado, Si me matan bueno o la propia Hijo de la luz y de la sombra fueron sonando ayer en el Pazo da Cultura pontevedrés bajo la estela de varios audiovisuales sobre la figura del poeta, firmados por autores de lujo como Bigas Luna, Isabel Coixet, Manuel Gutiérrez Aragón o Garci, y también de los dibujos de Javier Mariscal sobre el paisaje levantino. Claro que la ventaja que tiene Serrat es que sea con sus clásicos - Para la libertad fue sin duda el tema más aplaudido-o con temas que solo llevan retenidos dos meses en los oídos de sus fans, como es el caso de su último trabajo, no hay público que se le resista, aunque sea sentado. Un Pazo da Cultura abarrotado, que acabó de pie, aplaudió emocionado la lección de literatura que ofreció el Nano, como le siguen llamando sus allegados, quien demostró que sigue en plena forma. El sentido trágico de la vida, el amor vivido con toda la pasión o las ansias de libertad ( Solo quien ama vuela es un poema en el que Miguel Hernández no se resigna a estar en prisión) estuvieron presentes en este recital en el que música y poesía se fundieron más que nunca y donde Serrat incluyó también recitaciones y comentarios sobre la vida del poeta. Al final, regaló un bis para cerrar un concierto que duró menos de dos horas. Después de esta primera parada en Pontevedra, Serrat estará esta noche en el Coliseum de A Coruña y cerrará su periplo por Galicia mañana en el Palacio de Congresos de Santiago.