El jurado popular ha encontrado a José Carnero culpable del homicidio de Pilar Palacios en el año 2007
02 dic 2012 . Actualizado a las 02:04 h.O Chucán está de nuevo en la cárcel. Otro tribunal popular lo declaró ayer culpable de haber matado a Pilar Palacios, en septiembre del 2007, después de haber mantenido relaciones sexuales con ella. El hecho es considerado un homicidio porque los jurados entendieron que José Carnero no aumentó, con su extremada violencia, de manera innecesaria el sufrimiento de la víctima. Esa catalogación evita que al condenado puedan castigarlo con hasta 20 años de prisión. El fiscal planteó ayer, tras la lectura del veredicto, que la pena que se le imponga (cuestión que corresponde a la presidenta del tribunal, la magistrada María Luisa Sandar) oscile entre los siete años y medio y los quince de prisión.
Media hora después de conocer el veredicto de culpabilidad, la magistrada firmó un auto decretando la prisión de Carnero que, durante una temporada, ya no podrá volver a su casa de Sober ni a vagar por las calles sin saber adónde ir. Aunque el fiscal planteó la posibilidad de que fuera ingresado en un centro especializado en psiquiatría, como también había hecho su abogado, esta alternativa quedó descartada inicialmente. De momento, O Chucán estará en la cárcel de Bonxe en la que ya pasó tres años, cuatro meses y once días hasta que otro jurado popular lo declaró inocente y quedó en libertad a principios del 2011. A los cinco días de estar libre confesó la muerte de Pilar Palacios al periodista de La Voz Carlos Cortés.
¿Por qué este nuevo jurado declaró culpable a O Chucán? En primer lugar porque probó por unanimidad cinco aspectos claves y un sexto por mayoría. Otros cinco, sin embargo, los votaron como desfavorables.
Consideraron probado, de acuerdo con los testimonios de las compañeras de Pilar y del responsable del club donde trabajaba, que ella salió del local de alterne en compañía de José Carnero y que ambos fueron a la casa de este, situada en una aldea de Sober. También dieron como cierto que entre el sábado 15 y el domingo 16 de septiembre del 2007, O Chucán agredió a la mujer con uno o varios objetos contundentes (un mazo, un hacha o un hierro alargado). Asimismo, por unanimidad, los jurados estimaron que esa agresión tenía intención de acabar con la vida de la mujer y que empleó extremada violencia, abordando a Pilar Palacios de forma sorpresiva. Sin embargo, por 6 votos a favor y 3 en contra, los jurados estimaron que esa gran violencia no aumentó de manera innecesaria el sufrimiento de la víctima.
El portavoz del jurado razonó el veredicto de culpabilidad de O Chucán explicando una serie de pruebas que fueron claves, como la existencia de relaciones sexuales, probadas porque en el cuerpo de la mujer se apreciaron restos del semen del acusado. La aparición del cadáver en su casa, sin que diera explicaciones al respecto «e incurriera en numerosas contradicciones», fue otro de los detalles que convenció al jurado.
No aceptaron los integrantes del tribunal que pudieran intervenir otras personas en la muerte de Pilar «porque los vecinos no vieron personas ni coches en el lugar». Otro elemento de prueba, dijeron, fue la camisa de la víctima, que tenía células de Carnero, y también de una mujer que no se pudo identificar. Concedieron gran importancia, asimismo, a que hubiese también restos biológicos en un hacha y un mazo, piezas que, dijeron, fueron susceptibles de haber sido usadas en la matanza.
Los jurados consideraron, por 5 a 4, que cuando el acusado cometió los hechos tenía alterada la percepción de la realidad. Eso motiva que la pena que le impongan tenga que ser rebajada entre uno y dos grados. También se expresaron en el sentido de que no debería concedérsele indulto alguno en caso de reunir requisitos para ello.
Finalmente, el fiscal pidió una pena de prisión de entre siete años y medio y quince y elevó a 200.000 euros la indemnización para el hijo de la víctima.