Una vistosa ruta de 5,3 kilómetros enlaza Vilamor, Vilar y Froxán
20 jun 2017 . Actualizado a las 13:23 h.Entre los pueblos de Vilamor y Froxán, pasando por Vilar, discurre uno de los tramos más vistosos de la Ruta do Lor, el itinerario de senderismo más largo de la sierra de O Courel. El recorrido puede empezar en Vilamor, a cinco kilómetros de Folgoso y a 36 de A Pobra do Brollón, en la carretera que une ambas capitalidades municipales.
El camino arranca a la derecha de la carretera en la salida hacia Folgoso, en un punto donde hay un panel informativo. El primer trecho del sendero es ancho y los vecinos de Vilamor lo utilizan para acceder a las fincas y al souto de Freán. Al cabo de trescientos metros hay que tomar un desvío a la derecha hacia el cauce del Lor. Este tramo es más estrecho y pronto empieza a perder altura, mientras discurre entre encinas, madroños, robles y castaños.
Después la pendiente se suaviza hasta llegar al río -en el kilómetro 1,2-, que hay que cruzar por el puente de Rastradeira, reconstruido hace pocos años. El camino gira luego a la izquierda, bordeando el gran espolón rocoso del castro de Vilar.
Roble, castaño y alcornoque
La senda avanza unos doscientos metros entre monte bajo antes de entrar en una zona poblada por robles y, unas decenas de metros más adelante, en el souto de Vilar. La aldea está en el kilómetro 2,1. Desde aquí hay que seguir hacia el castro de Vilar, pasando ahora por la parte alta del souto. A unos seiscientos metros hay un cruce de caminos. El de la izquierda lleva a Froxán, pero para visitar la ermita de San Roque y el castro -a 50 y 150 metros respectivamente- hay que seguir de frente. Después es preciso volver al cruce y bajar en dirección a Froxán. Al cabo de unos trescientos metros, el camino sale del souto y entra en una zona de monte bajo, donde las vistas del valle ganan en espectacularidad. De frente y a la derecha tenemos el se divisan el castro, el monte Pinido y Vilamor.
La senda cruza el pinar de Abraído ya cerca del Lor. Ahora hay que girar a la derecha para llegar al puente de O Bao -también renovado- y cruzar el río, en el kilómetro 4. Lo que queda antes de llegar a Froxán es un tramo de 1,3 kilómetros de longitud que discurre por un bosque de alcornoques y castaños.