Es la capital de provincia gallega con peores servicios y también la que menos billetes vende
11 may 2019 . Actualizado a las 11:54 h.La capital y la provincia lucense siguen siendo las cenicientas del transporte ferroviario de Galicia e incluso de toda la zona norte de España. Los escasos servicios hacen que el cómputo de usuarios sea de los más bajos a nivel nacional. Aún así, los datos estadísticos correspondientes al año pasado reflejan que Renfe ganó viajeros en relación al ejercicio de 2017, unos 600 aproximadamente en la estación lucense.
Fuentes de la compañía aseguran que durante 2018, el número de viajeros que subieron y bajaron en la estación lucense ascendieron a 67.300. El año anterior habían sido 66.700. Renfe asegura que en Galicia movió a 5,3 millones de viajeros, con un incremento con respecto al año anterior. Aclaran desde la operadora que las estadísticas facilitadas corresponden a personas que han tenido como origen o destino Lugo. Además advierten de que fue eliminado el impacto de los viajeros que han subido o bajado en Galicia (intracomunitarios) y, sin embargo, «por provincias se siguió es métrica».
La estación monfortina sigue siendo la que más volumen de usuarios tiene en la provincia. Según la estadística de Renfe, el año pasado contabilizó un total de 120.000, los mismos que en 2017. Todo apunta a que la tendencia seguirá manteniéndose, entre otras razones porque la terminal monfortina tiene muchos más servicios que la de la capital como consecuencia de la pérdida de fuelle del ramal de Betanzos y A Coruña.
Monforte sigue siendo una delas posibilidades para viajar por el día a Barcelona y todas las ciudades por las que pasa el tren que comunica con la capital catalana. Lo mismo ocurre con el País Vasco. Las expediciones de vuelta conectan con un tren que enlaza con Lugo.
Otro hecho curioso, que afecta los viajeros que suben o bajan en la estación monfortina, es el itinerario que ofrece Renfe para desplazarse hasta A Coruña. Discurre por Ourense y Santiago y no por Lugo, como parecería lógico. Es más rápido por el centro de Galicia.
A nivel provincial el registro presenta un movimiento durante el año pasado de 357.100 viajeros frente a los 356.300. Este volumen está muy lejos del resto de Galicia. A Coruña, por ejemplo, tuvo más de cinco millones de usuarios; Ourense, más de un millón; Pontevedra y 3.041.000. Por capitales, también Lugo queda en el furgón de cola, pero a muchísima distancia, incluso por debajo de Vilagarcía de Arousa, que tuvo 654.000 usuarios, frente 67.300.
El 2018 fue de continuidad en la capital lucense y en la provincia. No aumentaron los servicios, pero tampoco fueron suprimidos. El Tren Hotel nocturno de Madrid, sobre el que hace años pesa una amenaza de supresión, siguió estando operativo. Continúa también el Alvia directo (es decir, sin transbordo en Ourense) que va ganando algunos viajeros.
Sigue también funcionando el tren hotel a Barcelona y permanecen operativos los trenes lanzadera a Ourense que permiten enlazar con otros Alvia con destino a la capital de España por Zamora y Medina del Campo. Los larga distancia registran llenos en Navidad y Semana Santa.