Quince años tiene ya a sus espaldas la Feira da Rosca de Sober, por lo que ya puede considerarse plenamente integrada entre las tradiciones festivas y gastronómicas de mayor arraigo del sur lucense. La última edición, celebrada ayer, congregó cerca de un millar de personas en la plaza del Concello, donde se repartieron más de 1.200 raciones gratuitas del tradicional dulce, muchas de ellas acompañadas de ellos. En la distribución participó el alcalde José Gómez , con el apoyo de varios concejales y trabajadores municipales. Al mismo tiempo, los rosqueros instalados en la plaza -procedentes de las parroquias de Millán y Santiorxo y, en menor medida, de Vilaescura- vendieron unos dos millares de piezas.
Sin salirnos de Sober, nos vamos a ahora a las fiestas de Monforte. La participación de la centenaria Banda de Música de Sober en las fiestas de Monforte es una tradición de muchos años, casi tan arraigada con la procesión de la patrona. Siguiendo esta inveterada costumbre, la formación ofreció el jueves por la noche la primera actuación de los festejos, poco después del pregón inaugural que pronunció la secretaria xeral de Urbanismo, Encarnación Rivas . Fue en la plaza de España y reunió a mucha gente. La banda interpretó un divertido repertorio a base de conocidas bandas sonoras de películas y clásicos del pop.
Mientras Monforte disfruta de sus fiestas, Chantada prepara las suyas, que ya están a la vuelta de la esquina. Un elemento fundamental en ellas es el célebre Folión de Carros que se celebrará el sábado de la semana próxima. Aunque no todos los vehículos que participan en es desfile son auténticos carros del país, hay participantes que se empeñan en mantener la más antigua tradición. Los miembros de uno de estos grupos remojaron su carro en las aguas del Asma para hacer que la madera se hinche y soporte mejor el peso que deberá cargar durante la fiesta.
El ambiente festivo y multitudinario que reina estos días en el sur lucense puede ser también propicio para fomentar hábitos saludables. Fue lo que hizo la unidad asistencial de drogodependencias de Monforte, que esta semana instaló un puesto informativo en la calle Cardenal con al finalidad de advertir a los transeúntes, sobre todo a los más jóvenes, acerca de los riesgos del tabaquismo y del consumo de estupefacientes.