China cerca Taiwán con maniobras militartes tras la toma de posesión

María Puerto PEKÍN / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El nuevo presidente de Taiwán, Lai Ching-te, el jueves en Taipéi.
El nuevo presidente de Taiwán, Lai Ching-te, el jueves en Taipéi. RITCHIE B. TONGO | EFE

El ministro de Exteriores chino calificó de «dañino» el discurso del nuevo presidente, con el que reivindicó el derecho de la isla a decidir su futuro

23 may 2024 . Actualizado a las 21:33 h.

Pekín lanzó el jueves un serio aviso al recién investido presidente de Taiwán y a sus posibles aliados emprendiendo unas amplias maniobras militares que incluyen un simulacro del bloqueo de la isla. China quiere dejar claro que no le ha gustado el discurso de Lai Ching-te en su toma de posesión del lunes y presiona con unos ejercicios militares que involucran a la Marina, al Ejército de Tierra y las Fuerzas Aéreas, incluida la división de misiles.

La presión militar llega después de la política. El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, calificó de «dañino» el discurso de Lai que fue tildado de «secesionista y alborotador» por los medios chinos. Lai Ching-te pidió a China que deje de amenazar a Taiwán y reivindicó el derecho de los taiwaneses a decir su futuro durante su discurso de investidura del lunes.

El simulacro iniciado el jueves durará dos días. Li Xi, portavoz del Comando del Teatro Oriental de Operaciones del EPL (Ejército Popular de Liberación) no deja dudas sobre el carácter punitivo de la operación que describió como «un fuerte castigo por los actos separatistas de las fuerzas que defienden la independencia de Taiwán». También aseguró que el operativo es una «seria advertencia» contra la interferencia de fuerzas externas, en clara referencia a Estados Unidos, que se ha implicado públicamente en la defensa de la isla.

Desde Camberra, el comandante general del mando indo-pacífico de Estados Unidos, Stephen D. Sklenda, calificó de «preocupante» el despliegue militar chino. En rueda de prensa, el portavoz de Exteriores, Wang Wenbin, aseguró que los ejercicios son «totalmente legítimos y necesarios» y están en consonancia con el derecho internacional. Wang defendió una vez más la reunificación completa de China y advirtió que «la llamada independencia de Taiwán es un callejón sin salida».

Desde Taiwán calificaron los ejercicios militares chinos de «provocaciones irracionales» y de acciones que «dañan la paz y la estabilidad regionales». La operación miliar se parece a la llevada a cabo en 2022 tras la visita oficial de Nancy Pelosi a la isla. Incluye simulacros de ataque y de bloqueo de la isla para impedir la llegada de mercancías y una posible ayuda militar. Por primera vez en la operación se han incluido las islas controladas por Taiwán cercanas a las costas chinas.

Numerosos analistas consideran que una invasión de Taiwán es arriesgada y Pekín podría preferir aislar la isla autónoma y ahogarla económicamente. Esta opción reduciría la posibilidad de una intervención militar de Estados Unidos, ya que no habría ataque.

Un conflicto armado en la región repercutiría en la economía mundial. Por el estrecho de Taiwán circula más del 50 % del tráfico mundial de contenedores y Taiwán es el principal exportador mundial de semiconductores.