El régimen talibán disuelve el Ministerio de la Mujer y recupera la cartera de la Virtud y Prevención del Vicio
INTERNACIONAL
El departamento había sido creado durante la presidencia de Karzai
18 sep 2021 . Actualizado a las 09:14 h.Los talibanes disolvieron ayer oficialmente el Ministerio para Asuntos de la Mujer afgano, y en su lugar crearon el de la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, que se encargará de la rígida implementación de las normas islámicas y a cuyo frente estará Mohamad Khalid. Este ministerio ya existió en el Gobierno del primer régimen talibán en Afganistán, que fue disuelto tras su expulsión del poder con la invasión estadounidense en el 2001.
Al menos tres funcionarias del departamento disuelto confirmaron la supresión del organismo encargado de promover políticas públicas y derechos para las mujeres, asegurando que bajo el mandato de los talibanes «no existe» un ministerio para féminas. «Se abolió el Ministerio de la Mujer, los talibanes nos dijeron que ya no hay ningún ministerio para la mujer y que este se convierte en el Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio», dijo a Efe Islamuddin, exfuncionaria de la desaparecida institución.
La eliminación de esta cartera quedó oficializada ayer por las autoridades del Gobierno islamista con la instalación de un nuevo letrero en el que se lee: «Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio del Emirato Islámico de Afganistán». Decenas de empleados habían acudido el jueves a sus oficinas para reanudar su trabajo, pero los talibanes «no nos permitieron entrar en el ministerio», dijo Islamuddin.
El Ministerio de la Mujer fue creado en el 2001 bajo el Gobierno del entonces presidente afgano, Hamid Karzai, como parte de los esfuerzos internacionales para abordar los asuntos de la mujer y tenía alrededor de 850 empleados en todo el país. Durante las últimas dos décadas, la institución tuvo como misión desarrollar políticas, promover los derechos, eliminar la violencia y la discriminación contra la mujer, así como fomentar su participación activa en la vida social y política de Afganistán.
«Cuando los talibanes asumieron el poder, pensamos que habían cambiado, pero lamentablemente no vemos cambios en sus opiniones y actos», aseguró Dadras, exempleada del ministerio y activista por los derechos de las mujeres.
«Lo perdimos todo»
«¿Dónde está esa comunidad internacional que estuvo hablando de los derechos de las mujeres en los últimos 20 años, hoy nos quedamos atrás y solas, nadie nos escucha», dijo la activista entre lágrimas.
Para Dadras, la llegada de los talibanes, junto a la exclusión de las mujeres del Gobierno, y la pérdida del terreno ganado en los últimos 20 años, deja un camino incierto para el futuro de sus hijas, y las próximas generaciones femeninas de Afganistán.
«¿Por qué la comunidad internacional no nos apoya? Las mujeres lo hemos perdido todo, no tenemos a nadie que nos apoye», lamentó.