Irán condena a una pareja a 16 años de cárcel y 74 latigazos por mostrar su vida en Instagram

La VOz REDACCIÓN

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El líder supremo de Irán, Hasán Rohani
El líder supremo de Irán, Hasán Rohani Ebrahim Seydi / Iranian Presidency

Los argumentos del régimen de Teherán contra el ex campeón de kickboxing Ahmad Moin-Shirazi y su esposa, la influencer Shabnam Sharokhi, es que dan una imagen obscena que atenta contra la moral pública

30 may 2020 . Actualizado a las 18:54 h.

Poco queda ya de la antigua Persia del Shah más de cuarenta años después de la Revolución Islámica. Irán se ha convertido en un país en el que acaban de condenar a una pareja de Instagramers, que cuentan con un total de 1,5 millones de seguidores (590.000, él y 880.000, ella) a una pena conjunta de 16 años de cárcel, 74 latigazos más una multa económica. Su pecado: según las autoridades de Irán, realizar propaganda contra el régimen y publicar «fotos obscenas contra la moral pública» en la conocida red social, una de las pocas que están permitidas por el régimen de Teherán. En las fotos que muestra la pareja compuesta por el excampeón de kickboxing Ahmad Moin-Shirazi , conocido por Picassomoin, y su esposa, la influencer Shabnam Shahrokhi, se les ve practicando deporte en su casa de Teherán o mostrando escenas de la vida cotidiana. Ella, no lleva hijab, algo que es obligatorio para las mujeres de este país.

La condena del tribunal, como recoge Radio Farda, asciende a 9 años de cárcel para él, que argumenta desde su autoexilio en Turquía que las autoridades le dijeron «que no podía publicar nada sobre sus puntos de vista políticos o incluso publicar fotos en las que su esposa apareció sin hijab (traje islámico obligatorio)». Para ella, que también vive ahora en Turquía, la condena es de 7 años de cárcel, 74 latigazos y 3 meses de trabajo no remunerado para el municipio. Ahmad Moin-Shirazi defiende la igual entre hombres y mujeres, como ha manifestado varias veces en su cuenta, mientras que su esposa expone en las redes un estilo de vida propio de cualquier mujer occidental.

La suerte es que, tras el acoso recibido, la pareja y sus hijos optó ya en septiembre del 2019 por el autoexillio en Turquía después de haber pasado una noche en la cárcel, de la que lograron salir bajo fianza.