Bruselas se pliega a las necesidades de Merkel para deshacerse de inmigrantes

C. P. BRUSELAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

STEFFI LOOS | afp

La Comisión Europea presentará la próxima semana un Plan de Acción de Retorno para ampliar las deportaciones masivas

22 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Estamos en la misma línea». Así resumía ayer el comisario de Migración, Dimitris Avramopoulos, la disposición de Bruselas a plegarse a las demandas de Angela Merkel, quien quiere allanar el terreno para ampliar las deportaciones masivas de migrantes. Y así se hará, según deslizó ayer el griego en el Congreso Europeo de Policía celebrado en Berlín. La Comisión Europea presentará la próxima semana un Plan de Acción de Retorno que ayudará a Merkel a aliviar parte de la presión migratoria con la que lidia el país desde el verano del 2015. Entonces la canciller abrió las puertas de par en par del país y dio la bienvenida a los refugiados. Hoy las cosas han cambiado mucho. Su popularidad no deja de caer y todavía queda una larga carrera de ocho meses por delante hasta las elecciones.

Aprovechando la reforma del actual sistema de asilo europeo que la UE tendrá que acometer en las próximas semanas, el Gobierno alemán solicita que se amplíe la noción de tercer país «seguro» para la deportación de migrantes. Su intención es que el término permita abarcar otras demarcaciones, como las regiones. Este atajo legal permitiría expulsar a migrantes hacia pequeñas islas de seguridad relativa en países que, a todas luces, no son seguros. «Todavía hay mucho trabajo que hacer en el ámbito de las readmisiones», alertó ayer Avramopoulos. Y es que no se pueden ejecutar las expulsiones si las autoridades de un tercer país no lo autorizan. Para acelerar los trámites, la UE ha extendido en los últimos meses cheques para financiar y estimular, en el papel, la economía local, los centros de atención de migrantes, las operaciones de control y seguridad en las fronteras y la lucha contra las mafias de personas, lo que la UE llama «atajar la crisis migratoria desde sus raíces». A pesar del interés prioritario de Berlín en torno a las deportaciones, su ministro del Interior, Thomas de Maizière, aprovechó la cita para instar a sus socios europeos a proteger las fronteras externas de la amenaza terrorista y a poner en marcha los chequeos sistemáticos en las entradas y salidas.