La canciller reclama una gestión rápida de los trámites burocráticos de los miles de personas que llegan al país para que puedan incorporarse al mercado laboral e integrarse
10 sep 2015 . Actualizado a las 23:26 h.La canciller alemana, Angela Merkel, reclamó una gestión rápida de los trámites burocráticos de los miles de refugiados que llegan al país para que puedan incorporarse al mercado laboral e integrarse. En medio de una intensa campaña a favor de la ayuda de los refugiados, Merkel visitó una sucursal de la Oficina Federal de Migración y Refugiados (BAMF), un centro de acogida de primera instancia y una «clase de bienvenida», como se denomina a las clases formadas por hijos de refugiados que aún no hablan alemán.
Merkel, que fue recibida con aplausos por los refugiados a su llegada al centro de refugiados en Spandau, destacó el trabajo de las personas en la BAMF en un momento en el que están desbordados y reclamó que se establezca rápidamente contacto entre los refugiados y las oficinas de empleo en el país. «Intentamos, como es natural, gestionar el papeleo lo más rápido posible, pero a la vista del gran número de solicitudes de refugiados que han llegado en los últimos días es comprensible que no se pueda hacer inmediatamente», comentó la mandataria a su salida.
En lo que va de año, hasta principios de esta semana Alemania, ha recibido 450.000 refugiados, de ellos 105.000 sólo en agosto y 37.000 en los primeros ocho días de septiembre. El gobierno espera la llegada récord de 800.000 refugiados este año. «Una rápida integración de los solicitantes de asilo en Alemania tiene prioridad, para lo que hay que hacer posible una gestión rápida de su situación para que puedan trabajar», afirmó la líder cristianodemócrata.
Dentro de este debate, la ministra de Trabajo alemana, Andrea Nahles, informó hoy de su intención de destinar entre 600 y 1.100 millones de euros para integrar a los refugiados en el mercado laboral. «En la vida cotidiana, la integración tendrá lugar seguramente en parte a través de los niños que aprenderán rápidamente alemán en las guarderías», dijo Merkel. «Espero y creo que la mayoría aquí quiere aprender rápidamente nuestro idioma», agregó. Asimismo, indicó que durante su visita, en la que pudo hablar con dos familias de refugiados, se quedó «impresionada» por «cuánto amor y afecto» se respiraba en el interior del centro de acogida.
De Spandau, Merkel puso rumbo a la escuela Ferdinand-Freiligrath en el barrio berlinés de Kreuzberg para visitar una de las conocidas como «clase de bienvenida», pensadas para los hijos de los refugiados que aún no hablan alemán. La mandataria alemana alabó el modelo de integración para hijos de refugiados y recomendó que sirva de modelo para todo el país. Cada recién llegado debe recibir una plaza rápidamente en una clase de este tipo, comentó. «Es un concepto muy progresista», opinó.
En Berlín existe desde hace cuatro años este tipo de clases. «Merece la pena ocuparse de cada niño. Hay tanto entusiasmo en los niños, tantas ganas de aprender y queremos darles un buen futuro», agregó.