La inminente liberación del general secuestrado por las FARC permitirá retomar el diálogo de paz

susan abad BOGOTÁ / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

21 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Un día después de que los representantes de los países garantes del proceso de paz, Rodolfo Benítez, de Cuba, y Rita Sandberg, de Noruega, anunciaran que el Gobierno y las FARC acordaron la liberación «a la mayor brevedad posible» del general Rubén Darío Alzate, Patricia Rey, portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Colombia, confirmó ayer que la oenegé tiene «luz verde» para trabajar en la operación.

La portavoz explicó que, «en el mismo momento en que las partes se ponen de acuerdo y se le hace la solicitud al CICR», la organización empieza a trabajar para liberar a las cinco personas: además del general Alzate, el cabo Jorge Rodríguez y a la abogada Gloria Urrego, que fueron raptados con él en el caserío de Las Mercedes, los soldados César Rivera y Jonathan Díaz, capturados a principios de mes en Arauca.

Rey añadió que, al igual que en las 71 liberaciones en las que ha colaborado la Cruz Roja en los últimos dos años en Colombia, «esta se realizará en la más completa confidencialidad». No obstante, la oenegé aún esperará a que se le garanticen las condiciones necesarias para poder «entrar en la zona que sea» e iniciar la misión acompañados de representantes de los países garantes, según informa Efe. La liberación podría producirse entre el sábado y el lunes, según Europa Press, una vez se firme el protocolo de liberación, de la que aún no se conocen los detalles.

Reinicio del diálogo

En La Habana, donde el Gobierno y las FARC desarrollan desde hace dos años diálogos de paz, el jefe negociador guerrillero Iván Márquez manifestó su confianza en la intermediación y las garantías del CICR y reconoció el papel de la oenegé en otras operaciones de liberación de secuestrados. También desde La Habana, el comandante guerrillero Pablo Catatumbo aseguró que la liberación no se hace a cambio de ningún pacto que les beneficie en las negociaciones.

El presidente, Juan Manuel Santos, refirmó durante un acto de entrega de tierras, que con la liberación de los cinco secuestrados se reanudarían los diálogos de paz en La Habana.

Desde Quibdó, capital de Chocó, ubicada a 15 minutos en lancha de donde el domingo pasado la guerrilla capturó al alto oficial, el personero del departamento, Miguel Becerra, dijo que, desde unas horas antes de anunciarse el acuerdo, «es evidente una disminución de la frecuencia de los patrullajes aéreos y fluviales». Añadió que las poblaciones aledañas al río Atrato esperan que liberen pronto a los secuestrados «por el bien de esas personas», pero sobre todo porque están pasando hambre, ya que no han podido salir a pescar ni internarse en la selva a cuidar sus cultivos, en un lugar donde la mayoría de la población vive y se alimenta de la pesca y la agricultura.