EE. UU. se entera ahora de que tuvo un topo junto a Bin Laden

Victoria Toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Un agente del FBI reclutó a un sudanés para infiltrarse en Al Qaida

28 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Parece el guion de una película de espías, pero es la realidad. El FBI tuvo un topo que llegó a estar junto a Osama Bin Laden en 1993, ocho años antes de los atentados del 11 de septiembre. Y lo que es más asombroso aún, nadie parecía saber nada de ello, excepto el FBI y la CIA. Ninguna de las comisiones que investigó la actuación de los dos agencias por el 11-S tenía noticia de la existencia del infiltrado en Al Qaida.

Para entender un poco lo sucedido hay que remontarse al 2010. Ese año un agente del FBI Bassem Youssef, estadounidense de origen egipcio y cristiano copto, llevó a la Agencia Federal de Investigación a los tribunales por haberle discriminado en los ascensos, una política adoptada tras el 11-S con los trabajadores originarios de países musulmanes. Durante el juicio, uno de los superiores de Youssef dio detalles de una de sus operaciones, que resultó ser una de las acciones más valiosas para el espionaje estadounidense.

En 1993 Youssef consiguió reclutar para el FBI al conductor y confidente del clérigo Omar Abdel Rahman que entonces vivía en Los Ángeles y ahora está en la cárcel por su implicación en varios atentados. Ese hombre era un sudanés que aceptó colaborar con Washington. Una de las cosas sobre las que informó fue que el clérigo le había dicho que si necesitaba dinero se pusiera en contacto con Osama Bin Laden. Y de hecho, el topo del FBI llegó a encontrarse con el líder de Al Qaida. Sobre ese encuentro también aportó información valiosa, ya que consiguió impedir un atentado contra una logia masónica en Los Ángeles. Según explicó el superior de Youssef, ese informante fue la única fuente que el FBI tuvo en la cúpula de Al Qaida.

A pesar de que esa información era pública, nadie reparó en ella. Y ha sido ahora, cuatro años después, cuando el diario The Washington Times la ha encontrado y la ha difundido.

Asesinado en Bosnia

También se ha sabido que en 1994 la CIA le pagó una enorme cantidad de dinero para que trabajara para ellos y quitárselo al FBI. El hombre accedió y la Agencia Central de Inteligencia lo envió a Bosnia. Allí, miembros de Al Qaida descubrieron que era un topo y lo mataron.

El Congreso anunció ayer que un panel de legisladores estudiará esta información e indagará las razones por las que el FBI no informó antes sobre ello.