Erdogan no retrocede y vincula las protestas con terroristas

Ilya U. Topper ESTAMBUL / EFE, AFP

INTERNACIONAL

Un grupo de mujeres participan en una manifestación en el parque Gezi, próximo a la plaza Taksim, en Estambul.
Un grupo de mujeres participan en una manifestación en el parque Gezi, próximo a la plaza Taksim, en Estambul. ARIS MESSINIS < / span>afp< / span>

Estados Unidos llama al Gobierno turco a que evite expresiones inútiles

07 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, mantuvo ayer la línea dura ante la mayor oleada de protestas en más de una década, al criminalizar a los manifestantes que protestan contra la eliminación de un parque en Estambul y asegurar que mantendrá sus planes urbanísticos.

Entretanto, miles de personas se concentraron ayer en la plaza Taksim de Estambul, a la que desde el pasado sábado no accede la Policía, y que es el epicentro de las protestas.

Los congregados esperaban con tensión la vuelta inminente de Erdogan, desde el lunes en una gira por el Magreb, y que ayer subrayó desde Túnez que no dará marcha atrás en sus planes de destruir el parque Gezi, aledaño a la plaza Taksim de Estambul, para erigir en su lugar un centro comercial.

Desde Túnez, el primer ministro admitió que la respuesta policial puede haber sido excesiva, pero se negó a buscar una salida negociada a la situación.

«No podemos negociar nada con la gente que provoca incendios», subrayó, al tiempo que acusó a los manifestantes de estar manipulados por «condenados por actos de terrorismo» y «conocidos por los servicios secretos». Aludía a un grupo de extrema izquierda que reivindicó un atentado contra la Embajada de EE.UU.

La portavoz de Estado norteamericana, Jen Psaki, llamó a los dirigentes turcos a evitar expresiones «inútiles que no contribuyen a apaciguar la situación».

Erdogan anunció también que siete extranjeros «implicados en los disturbios» habían sido detenidos. El ministro del Interior, Muamer Güler, indicó que cinco de los siete (dos franceses, dos iraníes, un griego, un alemán, y un estadounidense) habían sido liberados.

Ciudadanos y usuarios de redes sociales coinciden en que las palabras del primer ministro no harán sino prolongar las violentas protestas. Ayer se produjo la cuarta víctima, en esta ocasión en Adana cuando un policía se cayó de un puente en obras al perseguir a manifestantes.

«Erdogan no solo no se ha retractado sino que encima ha contrarrestado el tono suave empleado los últimos días por el presidente y el viceprimer ministro», asegura Özlem Dalkiran, una editora de medios alternativos.

Petek Özmek, empleada en una tienda de Estambul, dice que «parece como si la finalidad fuera llevarnos hacia la guerra civil». Para Nadja, estudiante, «Erdogan se ha convertido en un primer ministro en contra del pueblo. La resistencia no hará más que crecer», señala.

Una profesora universitaria destacó que «la actitud inflexible» del primer ministro «probablemente prolongará las protestas». «La Bolsa cae [4,7 % ayer], los inversores extranjeros abandonan el país, la estabilidad económica que respaldó su actitud confiada corre riesgo de desaparecer», opinó.

También en las redes sociales se multiplican mensajes críticos como «Erdogan ha vuelto a desafiar a todos. No podemos esperar que salga al balcón con palabras reconciliadoras». «Erdogan jura destruir el parque Gezi, Gül no lo tiene claro». Alude a la división entre el jefe de Gobierno y el presidente.