El acoso de la amante de Petraeus a otra mujer destapó el caso

Dan De Luce WASHINGTON / AFP, EFE

INTERNACIONAL

Los republicanos exigen más detalles de la investigación

12 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El escándalo que rodea la renuncia del jefe de la CIA, David Petraeus, por una relación extraconyugal, dio un giro ayer por las informaciones que indican que su supuesta amante, su biógrafa Paula Broadwell, habría enviado mensajes amenazantes a una segunda mujer.

El FBI comenzó a investigar quejas de acoso de Broadwell contra otra mujer, sin identificar, y fue al rastrear sus correos electrónicos cuando se toparon con la relación entre ella y Petraeus, según The New York Times y The Washington Post, citando a funcionarios del Gobierno. La destinataria de esos e-mails se asustó tanto que recurrió al FBI por protección y para ayudar a localizar al remitente.

De acuerdo con el Post, la segunda mujer no trabaja para la CIA y su relación con Petraeus no está del todo clara. Sin embargo, los correos indican que Broadwell la percibía como una amenaza para su relación con el jefe del espionaje.

Cancelado su cumpleaños

Broadwell, graduada de la academia de West Point y reservista del Ejército, vive en Charlotte (Carolina del Norte) con su esposo Scott Broadwell, radiólogo, y con sus dos hijos. La mujer, conocida en su ciudad por su trabajo de voluntaria para recaudar fondos para organizaciones de soldados heridos en combate, tenía planeado celebrar su cuarenta cumpleaños con una gran fiesta en Washington el fin de semana. La noche del viernes su esposo anunció por correo electrónico a los invitados la cancelación del evento.

El republicano Peter King, uno de los más férreos críticos de la Administración Obama y presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara baja, exigió que el FBI explique los pormenores de la investigación que condujo a la renuncia del director de la CIA. En general, los republicanos han elogiado los logros de Petraeus en el campo de batalla, pero ahora exigen respuestas sobre el origen de la investigación, sobre todo ante la posibilidad de un vacío de seguridad. Además, algunos creen que Petraeus renunció a su cargo para no tener que dar testimonio ante el Congreso el jueves sobre la respuesta del Gobierno al atentado contra el consulado en la ciudad libia de Bengasi, el 11 de septiembre.

«Esto simplemente no tiene sentido... estoy sugiriendo que hay demasiadas preguntas sin respuestas», declaró ayer King en un programa de la CNN. El legislador de Nueva York destacó que el FBI tiene que explicar los pormenores de la investigación, cuándo se enteró de la relación extramatrimonial del general y cuándo la comunicó a la Casa Blanca, entre otras interrogantes.

En el mismo programa, el senador demócrata por Nueva Jersey, Bob Menéndez, se mostró satisfecho con la información revelada hasta el momento. «De lo que se ha informado hasta ahora, parece que la cadena de sucesos es bien clara: había una amenaza y cuando el FBI la investigó, encontraron esos correos electrónicos con el general», señaló. «A menos que salga algo más, yo no veo una conspiración como lo hacen algunos de mis colegas», enfatizó.

Al contrario que Menéndez, su compañera de partido y presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, Diane Feinstein, no se dio por satisfecha con el flujo informativo y en declaraciones a Fox News pidió que se esclarezca por qué el FBI tardó en avisar al Congreso. Dijo que, al igual que otros congresistas, se enteró a mediados de la semana pasada de esta noticia, que cayó «como un relámpago».