El estado de emergencia fue decretado en la noche del domingo en California, donde varios incendios dejaron un muerto, forzaron a evacuar a miles de personas y arrasaron 12.000 hectáreas de vegetación y varios inmuebles, amenazando las lujosas casas de celebridades en el balneario de Malibú.
Los bomberos continuaban ayer luchando para controlar diversos focos de fuego cerca de Los Ángeles y de San Diego, en el sur de ese estado del oeste de Estados Unidos, en los que también resultaron heridos de gravedad cuatro bomberos que intentaban salvar una casa en Potrero, y otras trece personas.
El gobernador Arnold Schwarzenegger decretó el estado de emergencia en los condados de Los Ángeles, Orange, Riverside, San Bernardino, San Diego, Santa Barbara y Ventura por 11 focos de llamas. En Malibú, las residencias del director de Titanic , James Cameron, de la protagonista de Grease , Olivia Newton-John, y de los actores Ryan O'Neal y Victoria Principal están entre las 200 evacuadas. También están en peligro las de Mark Hammill, Sean Penn y David Duchovny, entre otras.
El siniestro, que se inició en Malibú el domingo, fue impulsado por fuertes vientos, y destruyó inmuebles, entre ellos un lujoso castillo de Malibú. Cerca de San Diego, los 36.000 habitantes de Ramona recibieron la orden de evacuación. Más tarde, la orden se extendió a los 250.000 habitantes del condado de San Diego. La situación empeoró ayer, con doce focos de llamas sin control. El fuego llegó a la Universidad Pepperdine, que ha sido desalojada. «La situación está cero por ciento controlada, estamos a merced del viento», aseguró la alcaldesa de Malibú, Pamela Conley. El Gobierno de Baja California suspendió las clases en Tijuana, Tecate y Rosarito, por el humo que llega del otro lado de la frontera.